Mientras la tensión llegaba a su pico máximo en Turquía y el Gobierno denunciaba un intento de golpe de Estado por parte de "un grupo" de militares, la cadena de noticias estatal TRT caía en manos del Ejército.
Una de las presentadoras de la televisora estatal leyó en vivo el comunicado oficial de los militares en el que anuncian que han tomado el poder en el país y que, a partir de ese momento, regiría el toque de queda y la ley marcial.
En el comunicado, el Ejército anunciaba que estaba trabajando en la preparación de una nueva Constitución "lo más rápido posible". De acuerdo con el texto, el país estaba dirigido por "un consejo de paz" que resguardará la seguridad de la población.
Además, anunciaban que la libertad de los ciudadanos estaba garantizada por dicho "consejo de paz", sin importar la religión, la raza o la lengua.
Además, usuarios en las redes sociales postearon imágenes de los estudios de TRT en las que puede verse a los uniformados caminando armados por los pasillos del lugar.
Sin embargo, horas más tarde los periodistas salieron al aire nuevamente a anunciar que había recuperado el control del canal. La misma conductora que había estado a cargo de la lectura del comunicado del Ejército, habló más tarde celebrando que habían vuelto al aire.
Con información de Reuters