De manera inesperada, Álvaro Niño Cruz, Juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia penal Federal en el estado de Oaxaca, dispuso la liberación de tres traficantes de drogas que fueron detenidos el pasado 2 de noviembre con 600 kilos de cocaína.
“No obstante todo este trabajo que se realiza en el mar para poder evitar el trasiego de drogas, sobre todo proveniente de Sudamérica, desafortunadamente una de las últimas operaciones que se llevó a cabo en Huatulco, Oaxaca, el juez Álvaro Niño Cruz ordenó la inmediata libertad de dos personas que traficaban con droga”, denunció el subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja.
Desde Palacio Nacional, como parte del informe semanal “Impunidad Cero”, Mejía Berdeja explicó que durante el operativo de captura los responsables realizaron “diferentes agresiones” contra el personal naval, que eventualmente logró asegurarlos.
Sin embargo, detqalló el subsecretario, el juez calificó de ilegal la detención argumentando que la operación aconteció fuera de la zona económica exclusiva, en donde supuestamente la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) no cuenta con las facultades legales necesarias para efectuar detenciones.
Por tal motivo decretó la inmediata liberación de Juan José “N”, Samuel Alexander “N”, Andrés Filiberto “N” y Ramón “N”, con efecto de sobreseimiento, previo a calificar de ilegal la detención hecha el pasado 2 de noviembre por la Semar.
“La Fiscalía General de la República (FGR) va apelar esta determinación de este juez, pero aquí lo grave es que ese día se había asegurado una embarcación menor, motores, bidones con combustible, 600 kilos de cocaína. Además de ellos, estos sujetos trataron de realizar disparos de arma de fuego contra la aeronave de la Marina que realizó las operaciones”, informó Mejía Berdeja.
“Nomás faltaba que el juez les regresara los 600 kilos de cocaína”
Los hechos ocurrieron a las 9:20 horas del 2 de noviembre después de que las autoridades interceptaran una embarcación menor sin matrícula, nombre ni bandera visibles en Alta Mar, aproximadamente a 237 millas naúticas al suroeste de la costa de Huatulco, Oaxaca.
Sin embargo, al percatarse de la unidad naval, los responsables comenzaron arrojar paquetes por la borda, aumentando su velocidad y evadiendo las indicaciones de detenerse. Mientras efectuaban movimientos zigzagueantes, soltaron una lona con la intención de enredarla en el fuselaje de la aeronave, mientras continuaban lanzando bultos de color negro y blanco al mar.
Uno de los tripulantes levantó un arma de fuego en dirección a la aeronave en tres ocasiones, por lo que la tripulación de la aeronave respondió con fuego de advertencia. Sin embargo, al abordar la embarcación, personal naval se percató que habían 4 personas (tres heridos), un bulto y dos ladrillos de droga, así como contenedores de combustible, procediendo a solicitar evacuación médica para los heridos.
Posterior a esto la embarcación sospechosa detuvo su marcha y el tripulante que portaba el arma, procedió arrojar su arma al mar.
La embarcación fue asegurada a 233 millas náuticas al sur de Huatulco, donde fueron detenidas cuatro personas y se recuperaron los empaques con 67 ladrillos y 24 bultos de cocaína con un peso estimado de 601 kilogramos y 2 mil 775 litros de combustible en dos cubitanques de mil litros y 30 bidones de 50 litros.
“Los tripulantes de esa embarcación se negaban a detenerse, realizando maniobras evasivas y efectuando disparos al helicóptero, por lo que personal de la Fuerza de Reacción Aérea respondió con disparos discapacitantes a los motores, de los disparos realizados lesionaron a dos tripulantes, priorizando el traslado vía aérea de un tripulante con herida de pulmón a la Ciudad de México para continuar con su atención médica”, informó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
“Aquí nomás faltaba que el juez les regresara los 600 kilogramos de cocaína”, concluyó Berdeja.
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