La figura del mexicano a nivel internacional ha tenido múltiples interpretaciones; si bien la más popular encasilla a las y los habitantes del país azteca en estereotipos que incluyen un gran bigote, sombrero charro y una botella de tequila, lo cierto es que la población de México es mucho más que eso.

Y es que fuera del país no todo el mundo sabe lo surreal que podría resultar vivir en un lugar en donde se comen tortas de tamal, los animales salvajes son avistados en plena calle, los políticos bailan cumbias, existe chile del que pica y el que no pica e incluso el propio presidente de México asegura que la mejor forma de protegerse contra el COVID-19 es a través de oraciones.

No obstante, el pueblo mexicano también ha resultado ser unido, resiliente y sobre todo la cuna de grandes talentos que han puesto el nombre de México en alto en la esfera internacional, tal es el caso del cineasta tapatío, Guillermo del Toro.

Gracias a su innegable talento, Guillermo del Toro ha logrado posicionarse como uno de los cineastas más grandes de México; el director de películas como El Laberinto del Fauno o La Forma del Agua se ha ganado el cariño del público gracias a su carismática y humilde personalidad pues, aunque ha alcanzado la fama mundial, en más de una ocasión ha revelado sentirse sumamente orgulloso de su país y sus raíces.

Incluso, el también ganador del Óscar ha participado en múltiples proyectos para que niños, niñas y adolescentes mexicanos puedan cumplir su sueño de convertirse en cineastas a través de becas que él mismo financia.

Aunque el ser mexicano se ha usado en múltiples ocasiones para justificar distintas acciones relacionadas a la cultura y peculiar personalidad de las y los habitantes de México, Guillermo del Toro, sin querer queriendo, resignificó dicha frase que miles de usuarios de redes sociales han utilizado e incluso la han convertido en meme nacional.

Fue en 2018 cuando el popular cineasta ganó el premio a Mejor Director durante la edición de aquel año de los Golden Globes, no obstante, tras recibir su galardón ofreció una conferencia de prensa en donde una reportera le preguntó acerca de su tan característico estilo cinematográfico:

“Tú realmente entiendes y tienes una extraordinaria habilidad para mirar en el lado más oscuro de la naturaleza humana, la fantasía y el terror, pero también eres una persona muy alegre y amorosa ¿Cómo le haces para encontrar ese balance?”

La respuesta del carismático cineasta fue lo que causó gran conmoción y despertó un sentimiento nacionalista:

“Soy mexicano y ¿sabes? Nadie ama la vida más que nosotros”

Guillermo del Toro adjudicó su grandiosidad a su cultura y es que, señaló, los mexicanos son muy conscientes de la muerte así que lo precioso de la vida radica en estar lado a lado con ese único lugar al que todos en algún momento irán.

“Todos en este planeta abordamos un tren con un destino final: la muerte. Así que en el tren vamos a vivir, tendremos belleza, amor, libertad y creo que cuando tú eliminas uno de los dos lados de la ecuación se vuelve un panfleto pero cuando tomas una parte de la oscuridad para contar lo luminoso es la realidad”, aseveró Guillermo del Toro.

La puntual respuesta de Guillermo del Toro generó gran revuelo en redes sociales pues, más allá de acentuar aspectos negativos o controversiales de México y su sociedad, el cineasta mexicano expuso una cara poco conocida sobre los mexicanos; aquella que es capaz de anteponerse a las adversidades para lograr sus sueños, incluyendo su cultura y raíces como parte elemental de su éxito.

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