CNDH respaldó militarización de la Guardia Nacional; el Centro Prodh lo tachó como una “penosa falta de independencia”

La autonomía de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) volvió a ser cuestionada tras avalar la integración de la Guardia Nacional (GN) a la Defensa Nacional (Sedena). Razón por la cual, aseveró, negó impugnar la reforma ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“La CNDH tiene claro que en México no hay un mando militar arbitrario, mucho menos continuidad de políticas de militarización como las prevalecientes en los sexenios anteriores”, declaró el organismo en un extenso comunicado de prensa. Mismo el cual, según el Centro Prodh (Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez), refleja una “penosa falta de independencia”.

Así lo expresó el Centro a través de su cuenta de Twitter, en la cual agregó que la renuncia de la Comisión para interponer acción de inconstitucionalidad ante el Judicial refleja “su desconocimiento de estándares” en materia de Derechos Humanos (DDHH).

“La CNDH evidencia una vez más su falta de autonomía: abdica de su facultad de interponer acción de inconstitucionalidad vs las reformas a la Guardia Nacional”, publicó el 13 de septiembre pasado.

El pasado 8 de septiembre, la Cámara de Senadores aprobó en lo general la iniciativa promovida por el presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), para fortalecer su estrategia de seguridad. Dos días después, la reforma se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

Con ello, se intensificaron las críticas contra el Gobierno Federal por, supuestamente, promover la fallida política de seguridad iniciada desde el sexenio de Felipe Calderón, y la cual - según organizaciones - no sólo es ineficiente para el combate a la delincuencia organizada, también atenta contra la Constitución.

Pero en contraste, el pronunciamiento de la CNDH afirmó que con la aprobación de la iniciativa se reconoce “la existencia de una crisis de inseguridad y violencia”, por lo cual aseveró que “la intervención de la Sedena puede y es admisible”, siempre y cuando, aclaró, su participación esté limitada en tiempo y casos de excepcionalidad: ““Lo que vivimos hoy es un nuevo proceso transformador”, puntualizó.

Respecto al papel de la GN, la Comisión negó que su integración a la dependencia presidida por Luis Cresencio Sandoval implique el abandono de su naturaleza teóricamente civil. En ese tenor, acreditó como “verdaderamente prioritario” la presencia de la Institución en escenarios dónde la violencia superó la capacidad de las policías locales y municipales.

Aún así, subrayó que la formación de los elementos de la Guardia Nacional debe ser diferenciada de los cuerpos militares, por lo cual planteó diversas acciones a desarrollar en relación con la recién aprobada reforma.

“Sumamos a la ejecución de las reformas, mediante su observancia y monitoreo (...), pero también impulsando acciones preventivas, iniciativas de capacitación y formación que garanticen que en esta etapa de construcción de una Guardia Nacional consolidada, se afiance a la vez que su carácter civil”, aseveró.

Es importante señalar que el pronunciamiento de la CNDH suscitó unos días después que otros organismos - como la oficina de las Naciones Unidas (ONU) o la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) - advirtieran las repercusiones de militarizar a la GN.

Por esa razón, el presidente López Obrador respaldó y aplaudió a la Comisión: “Me da mucho gusto que tenga una postura distinta a la de los de la ONU y organismos conservadores que han guardado silencio ante la corrupción”, señaló este 14 de septiembre desde Palacio Nacional.

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