Alfredo Maya Ortiz, el único sentenciado por el caso de la discoteca New’s Divine, fue liberado durante la madrugada de este jueves 8 de septiembre luego de que un juez de ejecución le otorgara la libertad condicionada.

“Ahorita quisiera estar con mi familia y poder recuperar un poco lo que perdí”, comentó Maya Ortiz al salir del Reclusorio Oriente y reunirse con sus familiares después de haber estado tras las rejas durante 14 años y tres meses.

Cabe recordar que estuvo detenido desde el 20 de junio de 2008, el día en que ocurrió la tragedia que cobró la vida de 12 personas (nueve jóvenes y tres policías) que fallecieron por asfixia durante un operativo policial descoordinado del Gobierno del entonces Distrito Federal, ahora Ciudad de México.

Tuvieron que pasar cuatro años para que a Maya Ortiz le dictaran una condena de 24 años y nueve meses de prisión por el delito de corrupción de menores, cosa que ocurrió en agosto de 2012. Al año siguiente, en mayo de 2013, la extinta Procuraduría General de Justicia capitalina aumentó la sentencia a 29 años.

“Fue un cochinero todo lo que me hicieron, me fabricaron las pruebas en la Procuraduría”, aseguró Maya Ortiz, dueño del New’s Divine, discoteca que comenzó sus operaciones a finales de la década de 1990 bajo los nombres de ‘Bingos’ y ‘La Rocka’.

En este sentido, señaló como “verdadero responsable” del lamentable suceso a Guillermo Zayas, exjefe del Mando Único del Sistema de Coordinación Policial (UNIPOL) en la alcaldía Gustavo A. Madero, quien fue exonerado el pasado mes de mayo por las autoridades judiciales de la CDMX.

Según informaron fuentes ministeriales, Alfredo Maya Ortiz permanecerá en libertad condicionada con monitoreo electrónico y tendrá que exhibir una garantía económica de 71 mil 340 pesos.

Debido a que el sistema penitenciario no cuenta actualmente con un brazalete para el monitoreo, el ahora liberado deberá permanecer en su domicilio hasta que esta medida pueda ser efectuada adecuadamente. Además, tendrá que reportarse vía telefónica en horarios específicos y cada 15 días deberá acudir a la Subdirección de Coordinación de Control y Seguimiento a Externados, Monitoreo Electrónico y Presentaciones Personales del Sistema Penitenciario.

Al continuar con las declaraciones respecto al exjefe policial, Maya Ortiz denunció que Zayas ha sido protegido por el gobierno a lo largo de los años y recordó la ocasión en que, aún en proceso penal y administrativo, fue designado con un cargo público en Campeche.

“¿Dónde está Guillermo Zayas? Lo protegieron, ¿y saben quién lo protegió? Si mal no recuerdo ahorita está como fiscal en Campeche, creo”. El actual titular de la Fiscalía de aquel estado es Renato Sales Heredia quien, efectivamente, recomendó la designación de Zayas como director de la policía de Ciudad del Carmen en octubre de 2015, de acuerdo con una entrevista del entonces alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus a La Jornada.

Dicho nombramiento, comentó Maya Ortiz, tuvo repercusiones directas hacia él, pues se pensó que todo había sido coordinado por él desde prisión.

Adicionalmente, defendió su gestión al frente del New’s Divine y aseguró que “no era un lugar de mala muerte”. Respecto a dicho tema, aseveró que los dictámenes de orina contemplados al inicio de la investigación habían sido falsificados y sustituidos por los de otros menores que no habían estado en el lugar de la tragedia.

“Fabricaron los dictámenes de orina. Hay un nombre de un menor que fabricaron y era copy paste [porque] era la declaración de otro menor. Muchas irregularidades, mucha mano negra”, dijo a los medios a las afueras del Reclusorio Oriente.

Sumado a ello, mencionó que la información sobre el operativo compartida en aquel entonces por Zayas era falsa y que las acciones policiales que derivaron en la desgracia fue en contra de los jóvenes “por el simple hecho de estarse divirtiendo, por ser pobres y vivir en colonias populares. Nada más por eso me ching*ron”.

Conviene recordar que UNIPOL fue creado e 21 de mayo de 2008, un mes antes de la tragedia en el New’s Divine. Este factor fue considerado como clave por Maya Ortiz para explicar el “estruendoso operativo” desplegado en la discoteca, pues habría funcionado como un pretexto para justificar el funcionamiento del programa puesto en marcha por Marcelo Ebrard (entonces jefe de gobierno del D.F.) y Joel Ortega Cuevas (secretario de Seguridad Pública de la capital en aquella época).

Otro funcionario que ha sido señalado entre los implicados en el caso es Francisco Chíguil Figueroa, quien hoy ocupa el mismo cargo que ocupaba aquel trágico día: alcalde de la Gustavo A. Madero.

El hoy militante de Morena llegó al puesto en 2006 y presentó su renuncia después de los sucesos de junio de 2008. Sin embargo, en 2018 se postuló nuevamente para encabezar el gobierno local y en 2021 fue reelecto.

Otro de los exfuncionarios vinculados con el caso es Rodolfo Félix Cárdenas, quien se desempeñaba como titular de la Procuraduría General de Justicia de la capital. Actualmente, es docente en la Escuela Libre de Derecho y es el abogado defensor de Jorge Winckler, exfiscal de Veracruz señalado por ser presuntamente responsable de los delitos de desaparición forzada y privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro.

Miguel Ángel Mancera también forma parte del catálogo de servidores que fueron relacionados como posibles implicados y hoy día conserva un cargo en la función pública. En 2015, ya como jefe de gobierno, ofreció una disculpa pública para las familias de las víctimas del New’s Divine y les entregó las instalaciones de la discoteca, de manera que se inaugurara un memorial para conmemorar a las y los fallecidos.

Las víctimas del operativo que tuvo un “desmedido uso de la fuerza pública”, de acuerdo con la Comisión de Derechos Humanos del antes D.F. fueron: Erika Janeth Rocha Maruri, Alejandro Piedras Esquivias, Daniel Alan Ascorve Domínguez, Isis Gabriela Tapia Barragán, Rafael Morales Bravo, Mario Quiroz Rodríguez, Mario Alberto Ramos Muñoz, Leonardo Amador Rivas, Heredy Pérez Sánchez y los agentes de la policía Remedios Marín Ruiz, Pablo Galván Gutiérrez y Pedro López García.

SEGUIR LEYENDO