Las situaciones de violencia física, psicológica y sexual dentro de las familias en México ha presentado un significativo aumento, pues 11.4% de las mujeres en el país señaló haber sido víctima de alguna agresión en este entorno tan solo en los últimos meses.
Este fue uno de los principales hallazgos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH 2021), realizada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) y cuyos resultados fueron presentados este 30 de agosto.
En cuanto a los tipos de violencia ejercida por otros miembros de sus familias, el de mayor prevalencia fue la violencia psicológica, la cual afectó 9.2% de las mujeres encuestadas.
Los principales familiares que agredieron psicológicamente a las mujeres en México fueron sus hermanos/as —23% de los casos— y sus padres —16.1%—. En tercer lugar las víctimas señalaron a sus madres — con el 14%— como las agresoras.
Respecto a la violencia física, los hermanos/as también se posicionaron como los principales familiares agresores, pues representaron un 37% de los casos, más del doble que las madres —14.5%— y los padres —13.3%—.
Un hallazgo relevante de la ENDIRECH 2021 es que al hablar de violencia sexual contra mujeres ejercida por parientes, los victimarios no están dentro de lo que se conoce como núcleo familiar, pues los principales agresores sexuales fueron los primos y los tíos de las encuestadas, con 25.3% y 24.8% respectivamente.
De manera adicional, se destaca también que la casa de las víctimas fue el lugar donde hubo una mayor prevalencia de violencia ejercida por sus familiares, ya que 63.3% de las mujeres fueron agredidas por algún familiar en su propio domicilio.
Aumento global de la violencia contra las mujeres
Los datos revelados por la ENDIREH 2021 reflejan, de manera concreta, la preocupante situación de violencia que sufren las mujeres en el país, ya que un total de 50.5 millones de mujeres de 15 años y más ha vivido, al menos, una situación de violencia. Esto equivale a una proporción de 7 de cada 10 mujeres.
La violencia psicológica es la que presentó mayor prevalencia (51.6 por ciento), seguida de la violencia sexual (49.7 por ciento), la violencia física (34.7 por ciento) y la violencia económica, patrimonial y/ o discriminación (27.4 por ciento).
El único rubro que disminuyó fue el de la violencia económica y patrimonial con menos 1.6 puntos porcentuales.
El Estado de México, la Ciudad de México y Querétaro se posicionaron como las entidades en las que son más frecuentes los actos de violencia en contra de las mujeres, con 78.7%, 76.2% y 75.2% respectivamente.
Por el contrario, Chiapas fue el único estado en el que la cantidad de mujeres violentadas fue menor del 50%, pues obtuvo un registro de 48.7 puntos porcentuales.
Respecto a los espacios en donde se suscitan las agresiones, resalta que el ámbito comunitario es el que presenta una mayor prevalencia de situaciones violentas, seguido del entorno en pareja y el ambiente escolar.
La gran mayoría de ataques en el espacio público fueron perpetrados por personas desconocidas —72.2% de los casos—, mientras que otros agresores identificados por las víctimas fueron conocidos, vecinos, amigos, conductores del transporte público, policías, sacerdotes y militares.
Las entidades que encabezan la lista de agresiones en áreas comunes fueron Querétaro, Ciudad de México, Estado de México, Colima, Aguascalientes y Jalisco, mientras que en el fondo del conteo se encuentran Sinaloa, Oaxaca y Chiapas.
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