Elementos del Mando Coordinado de la Policía de Morelos lograron la captura de uno de los principales objetivos criminales del gobierno estatal, Abraham “N”, alias “El Tacón”, en el municipio de Miacatlán.
Se trata de uno de los principales generadores de violencia en la zona limítrofe entre Guerrero y el Estado de México, según las autoridades, además de estar presuntamente vinculado a la célula criminal “Los Rojos”, dedicada al narcotráfico y secuestro.
Su detención se llevó a cabo cuando los efectivos realizaban un recorrido de vigilancia en la colonia Palpan de Barandas durante la noche del viernes 19 de agosto. Dos hombres que manipulaban ciertos objetos notaron la presencia de los uniformados y uno de ellos decidió huir a bordo de una motocicleta.
En tanto, el otro individuo guardó una bolsa, después sacó un arma de fuego y apuntó con ella a los oficiales, quienes, ante la amenaza y el inminente peligro, actuaron en respuesta y procedieron a realizar su respectiva detención. A pesar de la resisencia, no se reportaron efectivos heridos o lesionados.
Asimismo, los elementos lograron asegurar dos armas de fuego con varios cartuchos útiles y múltiples bolsitas que supuestamente contenían cristal. Por ello, Abraham “N”, de 32 años, fue puesto a disposición del Agente del Ministerio Público por su presunta responsabilidad en delios contra la salud y violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
“El detenido forma parte de la lista de objetivos criminales para el Gobierno del estado”, detalló la Fiscalía de Morelos. Sin embargo, no especificaron lo sucedido con el otro sujeto que huyó en la motocicleta, toda vez que no se reportó su detención.
Quiénes son “Los Rojos”
Como se mencionó anteriormente, “El Tacón” estaría presuntamente vinculado con el grupo criminal “Los Rojos”, conocidos por sus métodos violentos y agresivos en contra de sus rivales, lo que ha derivado en cruentos episodios y enfrentamientos, principalmente en los estados de Guerrero, Morelos y Puebla, su zona de operación.
Este grupo se desprendió del Cártel de Los Beltrán Leyva y habría iniciado de la mano de Crisóforo Rogelio Maldonado, un ex gatillero que fue abatido en un hospital de la Ciudad de México en 2012. Además del tráfico de drogas, también se dedican a la extorsión y secuestro, lo que los ha convertido en una amenaza directa para la población civil.
A pesar de que el liderazgo de este grupo criminal cambia de manera constante, Santiago Mazari, alias “El Carrete”, se ha posicionado como uno de los principales líderes de Los Rojos. Fue detenido en el 2008 por delitos contra la salud, pero a principios de 2009 fue puesto en libertad, pese a que le imputaron cinco años de prisión.
Tras salir de las rejas con una fianza de 5 millones de pesos, El Carrete logró convertirse en jefe de plaza de Amacuzac, Tetecala y Acatlán. De acuerdo con el periodista Héctor de Mauleón, con las autoridades a su lado financió campañas políticas; sin embargo, finalmente sería capturado en una segunda ocasión.
Fue a principios de agosto de 2019 cuando Mazari Hernández fue capturado de nueva cuenta y fue ingresado en el penal de máxima seguridad de Puente Grande, en Jalisco. Tras la caída de El Carrete, sus hijos se convirtieron en objetivo de las autoridades. Se trata de Alexis Oswaldo, Edwin Santiago y Erick Mauricio Mazari, quienes fueron detenidos de manera consecutiva en los años posteriores.
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