En el Zoológico de San Juan Aragón en la alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México, vive Ely, una elefanta africana de casi 40 años de edad, quien se encuentra sola y en malas condiciones; acusan activistas.
Por ello, más de una decena de asociaciones civiles en defensa por los animales interpusieron un amparo para que Ely pueda ser trasladada a un santuario en donde pueda vivir en libertad y en compañía de otros elefantes.
Ely pasó 25 años en el circo de los Hermanos Vázquez y desde hace nuevo años fue trasladada al zoológico de Aragón. Sin embargo, asociaciones como Abriendo Jaulas & Abriendo Mentes, Va por sus Derechos y AnimaNaturalist México señalaron que la paquiderma vive en malas condiciones.
De acuerdo con un comunicado de prensa, Abriendo Jaulas & Abriendo Mentes documentó desde 2017 las condiciones de vida de Ely, por lo que le fue solicitado al gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo que la elefanta sea trasladada a un espacio donde tenga buenas condiciones. Sin embargo, la regenta no ha dado una respuesta positiva en el caso.
Por ese motivo, diversos colectivos promovieron el juicio de amparo 1092/2021 ante el Juzgado Cuarto de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México, en el que se le solicitó al juez Ulises Oswaldo Rivera González que la elefanta sea liberada.
No obstante, la audiencia en la que se resolvería el amparo fechada para el 1° de agosto fue pospuesta de forma indeterminada.
Y es que una de las razones para que Ely abandone aislamiento es que no padezca el mismo destino que la osa polar Yupik, quien murió sola en el zoológico de Morelia en 2018 porque las autoridades no autorizaron su traslado a un cautiverio de osos.
Por esta razón, y en protesta ante la falta de acciones del gobierno capitalino, diversas organizaciones en pro de la defensa de los derechos animales se manifestarán el próximo jueves 11 de agosto frente a las oficinas de la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México en la Plaza de la Constitución.
En tanto, de acuerdo con AnimaNaturalist, Ely es considerada como la elefanta más triste del mundo por haber llevado una vida llena de explotación y soledad. En la actualidad presenta múltiples lesiones y enfermedades, pues los elefantes en cautiverio necesitan movimiento constante, así como estímulos para mantener su mente activa.
En ese sentido, Ely se encuentra aburrida y con depresión, señala la organización, ya que derivado de una serie de observaciones se determinó que el animal ha llegado a presentar episodios de coprofagia, que es ingerir sus propios desechos.
Por su parte, la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México afirmó en 2021, a través de la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la fauna Silvestre, que la elefanta se encuentra en buenas condiciones de salud, sumado a que todos lo días recibía atención médica especializada; no obstante, cuando llegó en 2012 al zoológico de Aragón ya presentaba varios padecimientos crónicos que incluían lesiones en su patas y una dermatitis.
Además, se dio a conocer, en contraste con lo señalado por las asociaciones de activistas, que el hábitat de Ely contaba con enriquecimiento ambiental, el cual constaba de ambientación del recinto y estímulos motrices, sensoriales, cognitivos, entre otros.
Sin embargo, Diana Valencia, quien se encuentra al frente de Abriendo Jaulas & Abriendo Mentes, cuenta con un expediente de años que, por medio de fotografías y videos, muestra cómo la salud y calidad de vida de Ely se han deteriorado, en parte, por las malas condiciones en las que vive.
Aunque, si bien “la elefanta más triste del mundo” no cuenta con las condiciones para ser liberada en un hábitat natural, hay varios santuarios que pueden recibirla, como el Santuario de Elefantes en Brasil, en donde ya se han pronunciado a favor de incluir a Ely en su población.
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