A lo largo de la historia, la Ciudad de México ha contado con gran cantidad de modelos de coches para el servicio de transporte, en los cuales diariamente viajan millones de personas. Sin embargo es a partir de la segunda mitad del siglo XX que la evolución de los taxis cobró una rapidez notable.
El origen de los taxis en México se remonta a los primeros años del siglo XX, pues desde 1908 hasta 1916 los primeros coches en servicio fueron conocidos como las calandritas, los cuales recorrieron las calles de la capital mexicana, se trataba de vehículos tirados por caballos.
Después de ellos le siguieron los fotingos. Durante 1916 hubo una huelga de tranvías, situación que algunos conductores aprovecharon para modificar coches Ford T, convirtiéndolos en colectivos de transporte público. Esos taxis fueron muy comunes en la capital en la década de los años 20 y para los 30 ya presentaban el conocido letrero de “libre”.
Los cocodrilos surgieron en la época de los años 50 y su sobrenombre tiene origen gracias al color verde que portaban y el diseño en la parte delantera con triángulos blancos, dándole la apariencia de cocodrilo, las unidades eran modelos Ford Fairlane. Los choferes presentaban uniforme y el servicio era compartido, es decir que el camino se repartía con desconocidos que iban a destinos similares.
Las cotorras datan de los 60 cuando algunos taxis fueron pintados de amarillo y verde, de ahí el motivo de su nombre, eran ejemplares Ford o Chevrolet y se popularizaron en 1968 cuando se celebraron los Juegos Olímpicos.
Entre la década de los 70 y 80 los corales y los canarios fueron los taxis de sitio del momento. Los segundos de ellos eran autos Volkswagen Sedán, mejor conocidos como bochos y perduraron hasta finales de los 90, gracias a su característico color verde es que recibieron su apodo. En aquel entonces los propietarios quitaban el asiento del copiloto para facilitar el ingreso de los pasajeros.
En 2008 el entonces jefe de gobierno, Marcelo Ebrad, descontinuo los bochos y los suplantaron los Tsurus, los cuales estaban pintados de rojo con dorado, por lo que los apodaron taxis Iron Man, posteriormente pidió que se añadiera a la cromática un estampado con ángeles de la independencia.
Para el año 2014 durante el gobierno de Miguel Ángel Mancera llegó el momento de los taxis rosas, también se habría anunciado el cambio de colores a rosa mexicano y blanco junto con el estampado de la CDMX, los ejemplares de las unidades que utilizaron eran Chevrolet Aveo y Tsuru. El motivo de cambio fue para conmemorar el derecho al voto por parte de las mujeres, la lucha contra el cáncer y la erradicación de feminicidios.
El último cambio realizado y registrado fue la llegada de los taxis eléctricos e híbridos en julio de 2016, modelo que se encuentra exento del programa Hoy no circula y la verificación vehicular, la unidades utilizadas son de última generación y son modelos Nissan Leaf con una capacidad bastante amplia, pues se pueden subir hasta 5 pasajeros en el coche.
Hasta la fecha se presenta la disyuntiva de qué transporte público es más rápido, unos optan por el metro, camión, cablebús y muchos más se inclinan por los taxis, no hay respuestas correctas o incorrectas, lo único verdadero es que las personas utilizan el medio que les sea más accesible y que les permita llegar a su destino.
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