La tarde de este martes 5 de junio se llevó a cabo una reunión urgente entre la cúpula del Partido Revolucionario Institucional (PRI), debido a la época de crisis que se encuentra viviendo el instituto al perder protagonismo en el panorama político mexicano.
Y es que el tricolor fue un partido diseñado desde el Estado, por lo que el objetivo principal era congregar a la mayor parte de la fuerza política del país para que se tomarán decisiones en conjunto durante la conformación de la nación después de los periodos intermitentes postrevolucionarios.
Sin embargo, en los tiempos recientes, el partido ha dejado el papel de hegemónico que lo caracterizó desde su fundación, pues la llegada de la alternancia política, el arribo del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), así como los constantes escándalos de corrupción han hecho que la ciudadanía dejé atrás al instituto que fue clave en la consolidación de las instituciones mexicanas.
Bajo este contexto fue que se llevó a cabo el encuentro entre los expresidentes y el actual líder, Alejandro Alito Moreno Cárdenas; los primeros pidieron al exgobernador abandonar su cargo, pero el exgobernador de Campeche se negó a hacerlo argumentando que la militancia lo había votado por cuatro años.
El encuentro se pactó luego de la misiva que los exdirigentes le hicieron llegar al actual líder priista, en la cual mostraron preocupación por el actual papel que el partido está desempeñando ante la ciudadanía, misma que ha evitado votar, en su gran mayoría, por sus representantes políticos.
Entre los presentes estuvieron Pedro Joaquín Coldwell (presidente de 2011 a 2012), Carolina Monroy Del Mazo (2016) Manlio Fabio Beltrones (2015-2016), César Camacho Quiroz (2012-2015), Beatriz Paredes (2007-2011), Dulce María Sauri (1999-2022), Claudia Ruíz Massieu Salinas (presidenta de 2018 a 2019), Humberto Roque Villanueva (1996-1997), Roberto Madrazo (2002-2005).
Además, la reunión contó con la presencia del líder en el Senado de la República, Miguel Ángel Osorio Chong, así como del coordinador de la bancada en el Cámara de Diputados, Rubén Moreira, dos de los priistas que más respaldo han mostrado hacia Alito.
De acuerdo a las declaraciones que ofreció Moreno Cárdenas, en la reunión que duró aproximadamente cuatro horas, los exdirigentes le mostraron alerta, así como algunas ideas para mejorar el rumbo del partido de cara a las elecciones del 2023 en el Estado de México y Coahuila, así como para la sucesión presidencial en 2024.
Aunque no lo dijo directamente, dio a entender que le pidieron su renuncia con el fin de recomponer el mal camino que quedó evidenciado durante los comicios del pasado 5 de junio; no obstante, éste se negó a que esto ocurriera, argumentando que fue electo para un periodo de cuatro años.
“Nosotros fuimos electos para un periodo de cuatro años, a mí no me puso ningún Presidente de la República, a mí me puso la militancia con casi dos millones de votos y ganados en las entidades federativas”.
Asimismo, fue muy claro en mencionar que los expresidentes nacionales lo instaron a mantener una unidad al interior del partido, con el fin de enfrentar los próximos procesos electorales que se desarrollarán en 2023 y 2024.
Al decidir permanecer al frente del PRI, Moreno Cárdenas también informó que la cúpula se decantó por seguir afianzando la unidad, así como fortalecer la participación del Revolucionario Institucional en la coalición Va por México -conformada en conjunto por el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD)-.
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