Primer Imperio de México: cuánto duró el gobierno monárquico de Agustín de Iturbide tras la Independencia de México

Un día como hoy, 19 de mayo, pero de 1822, el Congreso ratificó a Agustín de Iturbide como el primer Emperador de México

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Agustín de Iturbide fue nombrado emperador del país por un breve periodo de tiempo, entre mayo de 1822 y marzo de 1823 (Foto: INAH)
Agustín de Iturbide fue nombrado emperador del país por un breve periodo de tiempo, entre mayo de 1822 y marzo de 1823 (Foto: INAH)

Luego de que México se independizara de España en 1821, se estableció lo que se conoce como el Primer Imperio de México. Este estuvo a cargo de un militar que, en un principio, lucho en contra de los independentistas, del lado del Ejército Español: Agustín de Iturbide.

Luego de pelear a favor de los españoles, Iturbide realizó una alianza con Vicente Guerrero, esto a pesar de mantenerse alejado de las armas de 1816 a 1820, tiempo en el que cambió su opinión sobre la Independencia de la Nueva España.

Para el 24 de febrero de 1821, Agustín de Iturbide dio a conocer oficialmente el Plan de Iguala, en donde se proclamó la Independencia de México y su conformación como imperio bajo una forma de gobierno monárquico constitucionalista; la defensa a ultranza de la religión católica, sin tolerancia de alguna otra; y el respeto a los privilegios de la clase alta. Todas estas resoluciones, defendidas por el Ejército Trigarante, conformado principalmente por militares del Ejército Realista.

Bajo este plan, logró adherir a gran parte de la población novohispana a la causa, obligando a que el 24 de agosto de 1821, el capitán general don Juan O´Donojú firmara los Tratados de Córdoba, texto en el que, de manera no oficial, la Corona Española reconocía la independencia del Imperio Mexicano.

El 10 de febrero de 1821, Vicente Guerrero y Agustín de Iturbide establecieron una reconciliación entre las fuerzas realistas y el ejército insurgente (Foto: Gobierno de México)
El 10 de febrero de 1821, Vicente Guerrero y Agustín de Iturbide establecieron una reconciliación entre las fuerzas realistas y el ejército insurgente (Foto: Gobierno de México)

Con la entrada del Ejército Trigarante a la capital del país, el 27 de septiembre de 1821, y la firma del Acta de Independencia del Imperio Mexicano, se consumó la soberanía de la nación. Al día siguiente, el 28 de septiembre, se instituyó la Junta Provisional Gubernativa, que asumió el poder legislativo. Su tarea consistió en convocar a un Congreso constituyente y organizar la Regencia, que fungió como poder ejecutivo mientras se reunía el Congreso, con la finalidad de definir quién debía ocupar el trono mexicano.

El Congreso se instaló el 24 de febrero de 1822 y las inconformidades y desacuerdos se hicieron notar de inmediato. Por todos los medios, incluyendo los ritos solemnes de las secciones, los congresistas buscaron menoscabar la figura de Agustín de Iturbide.

El conflicto entre el Congreso e Iturbide se salió de control, la facción política republicana y la borbonista se unieron para evitar la entronización del Héroe de Iguala al conocer la deliberación del Gobierno de España, de no aceptar enviar a un descendiente de la dinastía de la Casa Borbón. Por ello, los iturbidistas, con el apoyo del pueblo, proclamaron la noche del 18 de mayo de 1822, la entronización de Agustín de Iturbide como primer emperador de México. Al día siguiente, o sea, un día como hoy, 19 de mayo, de 1822, el Congreso ratificó a Iturbide como emperador. No obstante, los conflictos continuaron e Iturbide decidió disolver el Congreso y nombrar una Junta Nacional Instituyente.

La única forma en la que logró mantenerse aquel efímero Primer Imperio Mexicano, fue por medio del Ejército Trigarante, pero el 2 de diciembre de 1822, Santa Anna salió al frente de su regimiento y recorrió las calles de Veracruz, proclamando la República. Unos días después lanzó el Plan de Veracruz, y el primero de febrero de 1823 dio a conocer el Acta de Casa Mata, el cual convocaba la reinstauración del Congreso. De esta manera, obteniendo la simpatía de la élite política y del Ejército Trigarante, el gobierno de Iturbide quedó sin apoyo.

La Independencia de México culminó el 27 de septiembre de 1821 con la llegada del Ejército Trigarante y Agustín de Iturbide a la Ciudad de México. (Foto: Twitter/@Cuauhtemoc_1521)
La Independencia de México culminó el 27 de septiembre de 1821 con la llegada del Ejército Trigarante y Agustín de Iturbide a la Ciudad de México. (Foto: Twitter/@Cuauhtemoc_1521)

El 3 de marzo de 1823, Iturbide decide reestablecer el Congreso, y para evitar el derramamiento de más sangre, presentó su dimisión. El 29 de marzo se declara inexistente el Imperio, y se procede a nombrar al Supremo Poder Ejecutivo. Éste se entregó a un triunvirato de generales: dos insurgentes y un realista.

Se podría decir que el Imperio de Agustín de Iturbide duró del 18 de mayo de 1822, que fue cuando fue ratificado por el Congreso, al 3 de marzo de 1823, o sea, menos de un año. Iturbide se exilió en Europa, pero un año después quiso regresar a México a advertir que España tenía planes de tratar de reinstalar su imperio en el país, pero fue fusilado el 19 de julio de 1824, acusado de traición a la Patria.

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