El embajador de Estados Unidos de América en México, Ken Salazar, fue visto saliendo de Palacio Nacional luego de que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) declarara que es posible que no asista a la Cumbre de las Américas, que se llevará a cabo en junio. De acuerdo con el presidente de México, con esto busca mostrar su postura a favor de la unión de todos los países americanos.
Durante la conferencia de prensa matutina señaló: “Bueno, pues todavía no se resuelve sobre la participación en la cumbre de Los Ángeles porque nosotros estamos planteando que no se excluya a nadie, porque buscamos la unidad de toda América y sentimos que no debe de haber confrontación.”
Entre los países que fueron excluidos de la reunión están Nicaragua, Venezuela y Cuba. El mandatario hizo declaraciones respecto a la relación actual entre territorio cubano y el país vecino, aseguró: “Estoy consciente de que hay grupos políticos en Estados Unidos que apuestan a la confrontación, y que quisieran tener de rehenes a los pueblos de América Latina y el Caribe, como es el caso del bloqueo a Cuba.”
Respecto a la situación con Venezuela, celebró que el país haya llegado a un acuerdo con una empresa estadounidense para permitir la extracción de un millón de barriles de petróleo diariamente. Ya que consideró que se trata de un arreglo beneficioso para ambas naciones ante el incremento constante del precio de este compuesto.
Se desconoce si Salazar pudo conversar con López Obrador durante la visita de hoy, que es la segunda en lo que va del año. Ya que el mes pasado los funcionarios se reunieron después de que AMLO acusó a Estados Unidos de “cabildear” contra la Reforma Eléctrica, iniciativa de ley rechazada, sobre la cual la representante comercial de EEUU mostró inconformidad debido a que representaba un riesgo para las inversiones.
Sin embargo, es sabido que el presidente de México y el de Estados Unidos, Joe Biden han conversado sobre este tema en el pasado, durante una llamada telefónica en la cual AMLO le pidió extender la invitación a la cumbre a todos los países de América.
Pese a la tensión generada por las diferencias ideológicas, Obrador reiteró que lleva una buena relación con el mandatario estadounidense, a quien considera “un hombre bueno, una persona de buenos sentimientos.” Pero lamentó que de continuidad a una política que, a su consideración, es intervencionista.
Si López Obrador cambia de opinión y decide asistir a la Cumbre de las Américas este año, sería su cuarta visita a territorio estadounidense. Las prioridades de México en este encuentro, que se llevó a cabo por primera vez en 1994, son la promoción de la libertad de comercio e inversión y de reformas en materia de migración.
Recientemente el presidente ha reafirmado el llamado a solucionar la situación migratoria de millones de mexicanos que radican en Estados Unidos actualmente. Además de que habló vía telefónica con Biden acerca de la necesidad de aumentar la inversión en los países de la región centroamericana.
La Cumbre de las Américas tendrá lugar en Los Ángeles, California en Estados Unidos, del 6 al 10 de junio. El país anfitrión decidió excluir a varias naciones debido a su situación política actual, al considerar que no son representantes de la democracia moderna.
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