El compositor y cantante Rubén Fuentes murió este sábado a los 95 años, en redes sociales el sector cultural y musical manifestó su reconocimiento a uno de los principales creadores de la música mexicana.
Rubén fue especialmente reconocido por ser el creador de las composiciones de las canciones como La Bikina, El Sol De La Negra, La Culebra, Las Alazanas, Como Si Nada, Qué Bonita Es Mi Tierra (en coautoría con Mario Molina Montes), Flor Sin Retoño, Ni Princesa Ni Esclava y ¿Sabes Una Cosa?, la cual fue escrita en colaboración con Manuel Lozano. Pedro Infante fue intérprete de más de 40 obras de la autoría de Rubén Fuentes, entre las que destacan Cartas a Eufemia y Copa Tras Copa.
Rubén Fuentes Gasson nació un 15 de febrero en el Municipio de Zapotlán El Grande, Jalisco. Es sin lugar a dudas uno de los compositores mexicanos más destacados de las últimas décadas; su creatividad como autor, arreglista y productor ha sido sello de vanguardia en la canción vernácula.
No se puede hablar de música mexicana sin mencionar a Rubén Fuentes, quien con sensibilidad y talento plasmados en su obra ha cautivado al público y ha hecho una valiosa aportación a los géneros del bolero ranchero y moruno, a la canción romántica y al huapango pero, sobre todo, creó el mariachi sinfónico trasladando su sonido caporal al de las trompetas, la vihuela y el guitarrón, internacionalizando así la música de México en el mundo.
Recibió sus primeros estudios musicales de su padre, el señor Agustín Fuentes, quien tocaba el violín en la Revolución Mexicana y quien se quedó al cuidado de Rubén desde que tenía tres años de edad, mientras que con el apoyo de su madre Tommy Gasson aprendió a ejecutar el piano (desde los siete años) y el violín. Cursó la secundaria y la preparatoria en Guadalajara, en donde continuó también con su formación en el ámbito de la música.
A los 18 años tocaba el piano con Silvestre Vargas y, en 1944, se integra al Mariachi Vargas de Tecalitlán en la Ciudad de México primero como ejecutante, luego como productor, arreglista y director musical, cargos que conservó —a excepción del de músico— cuando Mariano Rivera Conde, con quien consolidó una sólida relación laboral y de amistad, lo invitó a trabajar como su asistente en la disquera RCA Victor, en donde posteriormente fue nombrado director artístico.
Como compositor, ha conformado un repertorio de más de 300 obras entre las que se encuentran temas como La bikina, Que bonita es mi tierra (en coautoría con Mario Molina Montes) y ¿Sabes una cosa? (escrita en colaboración con Manuel Lozano).
Marco Antonio Muñiz se inició como solista con Luz y sombra, Que murmuren y Escándalo, tres canciones —escritas en colaboración con Rafael Cárdenas— de las más de 70 que le grabara el cantante mexicano. Por su parte, Pedro Infante interpretó 44 de sus obras entre las que se encuentran Cartas a Ufemia, Copa tras copa, ambas en coautoría con Rubén Méndez del Castillo, y Cien años, en colaboración con Alberto Cervantes.
Miguel Aceves Mejía, a quien enseñó a cantar con falsete, popularizó sus huapangos La verdolaga, Tres consejos, (ambos en coautoría con Alberto Cervantes) y La del rebozo blanco (escrita en colaboración con Rafael Cárdenas), mientras que Alberto Vázquez hiciera lo propio con El pecador (tema en coautoría con Mario Molina Montes).
También entre sus intérpretes destacan Pedro Vargas, Libertad Lamarque, José José, Amalia Mendoza La Tariácuri, Lucha Villa, Javier Solís, Julio Iglesias, Jorge Negrete, Domenico Modugno, Caterina Valente, Pepe Jara, Luis Miguel y, desde luego, el Mariachi Vargas de Tecalitlán, por mencionar algunos.
Además de su aportación como autor, de sus cargos en el Mariachi Vargas de Tecalitlán y de su trabajo como musicalizador de los temas de José Alfredo Jiménez en las décadas de los cincuenta y sesenta, Rubén Fuentes ha sido productor musical del Encuentro Internacional del Mariachi y la Charrería realizado anualmente en Guadalajara.
Entre sus distinciones están el haber sido declarado como Mejor Compositor del Año en 1954, 1958, 1959 y 1971; discos de platino por sus producciones Lucero de México y Cariño de mis cariños; dos Latin Grammy por su canción Ni princesa ni esclava interpretada por Vikki Carr y por su trabajo como productor en Canciones de mi padre de Linda Rondstadt; Premio Jalisco en el área de música por el Gobierno del Estado; el nombramiento —del cual se siente orgulloso y satisfecho— de Hijo Preclaro y Predilecto (1967) por el Ayuntamiento de Ciudad Guzmán; el reconocimiento Trayectoria (2008) por sus 50 años como compositor y la presea Gran Maestro (2016), galardón que enaltece el trabajo creativo de aquellos autores y compositores vivos que, con su talento e inspiración, han puesto en alto el nombre de México, siendo su obra un referente a nivel internacional, ambos otorgados por la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), entre muchas otras condecoraciones.
Con su talento, el maestro Rubén Fuentes Gasson ha logrado que la música mexicana se vista de gala y recorra el mundo entero.
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