Celaya bajo fuego: balaceras dejaron cuatro muertos y cinco heridos

Al menos cuatro personas han sido asesinadas y cinco más resultaron heridas luego de ataques múltiples en Celaya, Guanajuato, donde se han movilizado las fuerzas de seguridad durante las últimas horas.

De acuerdo con reportes locales, las agresiones comenzaron desde las 14:30 horas de este viernes en cinco puntos distintos de la ciudad. La Fiscalía de Guanajuato no ha informado oficialmente y se desconoce si los eventos de violencia están relacionados entre sí, pero guardan poca diferencia en circunstancias de tiempo.

En los hechos más recientes, una mujer fue asesinada y un hombre resultó lesionado luego de que los atacantes irrumpieran en su domicilio localizado en la colonia Brisas del Valle, sobre la calle Circuito Lagos.

Mientras que una de las primeras acciones ocurrió contra clientes de un autolavado, sobre el bulevar Adolfo López Mateos. Ahí se encontraban dos hombres al interior del establecimiento de nombre Burbuja, cuando arribaron varios sicarios que abrieron fuego.

Minutos después o casi de manera simultánea, dos sujetos más fueron asesinados en la colonia Gran Hacienda, sobre la calle Real San Luis. Los cuerpos quedaron tendidos sobre la vía pública.

Después se informó de una balacera en el bar la Modorra, ubicado en la colonia Alameda, calle Guillermo Prieto. Ahí dos personas resultaron lesionadas por disparos de arma de fuego.

Casi al mismo tiempo, pobladores informaron de un vehículo con un cadáver al interior sobre la calle Belisario Domínguez, al centro de Celaya.

Guanajuato, gobernado desde 1990 por el Partido Acción Nacional (PAN) tras la era del PRI, tuvo el aumento más drástico en asesinatos desde 2015.

Una de las principales causas fue la aparición del Cártel Santa Rosa de Lima (CSRL), grupo criminal que prosperó a través del robo de combustibles y al cual le ha sido arrebatado el territorio por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Los reportes señalan que el estado contabiliza 8 mil 764 homicidios dolosos en el mandato de Andrés Manuel López Obrador. Está por encima del promedio de los 32 estados hasta en 6 mil 119 víctimas, según cifras consideradas del 1 de diciembre de 2018 hasta el 30 de octubre de 2020.

Mientras que en 2017 hubo 1,084 ejecutados en la entidad; en 2018 la cifra se incrementó hasta 2,609; al año siguiente, en 2019, fueron 3,540; y para 2020 las muertes intencionales ascendieron al récord de 4,490 casos.

En el mapa criminal, los del CJNG pretenden tomar Guanajuato para sus rutas de trasiego de drogas como el fentanilo hacia el centro norte de México, en la frontera con Estados Unidos.

Mientras que el cártel local ve afectado sus negocios como la venta de metanfetaminas en ciudades como Irapuato y Celaya; el cobro de piso o secuestros; además del robo de combustibles, aún con operaciones menos articuladas.

Actualmente, el CSRL solo tendría presencia en ocho de 16 municipios que anteriormente dominaba, por ejemplo, en los Apaseos, Salamanca, Villagrán y Salvatierra.

Ante el arresto de sus mandos, ahora actúan como un cuerpo colegiado de jefes de plazas que sufren un debilitamiento paulatino, pero a ritmos muy lentos.

Los anteriores líderes pretendían afianzar su organización y hacerla perdurable, a través del financiamiento de campañas, incursión en el sector inmobiliario, y al establecer nexos con funcionarios. Pero los nuevos liderazgos carecen de ese componente y todo se ha centrado en una violencia agudizada por sobrevivir.

El presidente López Obrador ha reiterado que la violencia en el estado se debe a nulos resultados del fiscal, Carlos Zamarripa Aguirre, quien ha ejercido 12 años en el puesto y gracias a una reforma estará hasta 2028.

Por ello, el mandatario ha solicitado que sea relevado, pero el funcionario tiene el respaldo de la mayoría panista en el Congreso local como del gobernador de la misma fuerza política, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo.

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