El presidente Andrés Manuel López Obrador se quejó por lo intransitable de la carretera entre Metepec y Agua Blanca, en Hidalgo, mientras que el gobernador de la entidad, Omar Fayad Meneses, reviró con la petición de más recursos por el paso del huracán Grace.
López Obrador comentó del mal estado de la vía en su visita a Huayacocotla, Veracruz, y reiteró los daños ante el gobernador hidalguense, por lo que urgió a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes poner manos a la obra para reparar la carretera que ha pasado del pavimento a la terracería, según constató al transitarlo.
“Ahora que veníamos para acá de Metepec a Agua Blanca, que es Hidalgo, está intransitable el camino. Entonces ¿cómo le hacemos para construir los caminos?”, reclamó.
El mandatario planteó que la reconstrucción podría pasar por la experiencia en Oaxaca, donde pobladores recibieron y administraron recursos para construir carreteras de concreto en lugar de alguna empresa. De modo que se generó un efecto multiplicador, porque el empleo fue para los habitantes de la zona.
“Yo les pido que eso lo atiendan, que el secretario de Comunicaciones, Jorge Arganis, nos tenga una respuesta ante esto, porque viene uno acá y dice cualquier persona: ‘Mire en qué situación está el camino’, y el pueblo no está pensando que la responsabilidad es del gobierno federal o del gobierno del estado o del gobierno municipal, no, la responsabilidad es del gobierno y todos tenemos que resolverlo”, aseguró.
De regreso por la misma vía para su encuentro en Acaxochitlán, Hidalgo, el presidente fue recibido por las exigencias de Omar Fayad, quien solicitó más recursos por afectaciones a viviendas y escuelas, debido a la emergencia que causó el huracán Grace en agosto pasado.
Los análisis del Ejecutivo estatal destacaron daños en 27 demarcaciones de la entidad y para ello es necesario destinar alrededor de mil 197 millones de pesos.
El gobernador dijo desconocer el padrón realizado por la Secretaría del Bienestar para determinar afectaciones y según los cálculos en su poder, 8 mil 333 viviendas fueron contabilizadas por daños en 52 municipios, pero solo se atendieron mil 279 casas de 44 alcaldías. En cada uno de esos hogares se destinaron 35 mil pesos para reparaciones, cuya inversión total alcanzó los 44.7 millones de pesos.
Sin embargo, el priista aseguró que se dejaron sin apoyos a 350 viviendas en Xochiatipan, Molango de Escamilla, La Misión y San Felipe Orizatlán. Además, Fayad dijo que la propuesta presentada por el gobierno estatal para reparar carreteras fue desechada por Protección Civil. El plan incluía 21 obras por un monto de 206.5 millones de pesos.
“Hoy no hay fuente de financiamiento para atender el tema de las escuelas dañadas”, aseveró el gobernador sobre anteproyectos indefinidos para instituciones de educación básica.
Luis Cresencio Sandoval, general secretario de la Defensa Nacional, aseguró que se han entregado 100 refrigeradores y estufas, así como 381 colchones a 426 familias hidalguenses, según el censo de la Secretaría de Bienestar. Ello representa un avance del 34% de 1,704 insumos que serán distribuidos en su totalidad el 24 de octubre.
Fayad recordó que Hidalgo provee de agua a la Cuenca del Valle y la Zona Metropolitana conformada por el Estado de México y la Ciudad de México.
Por ello, la entidad se veía impedida de explotar sus pozos para la agricultura. Además, el gobernador trajo a colación que las aguas negras regresan de la capital del país a tierras hidalguenses y ello, junto con empresas cementeras, generan uno de los seis infiernos ambientales a nivel nacional. De ahí que enfatizó el papel del estado respecto a los centros urbanos.
El trasfondo de ese tema era una solicitud de reunión, aceptada por el presidente y programada en 15 días, para revisar los daños ecológicos causados por el desbordamiento del río Tula.
Pues el 7 de septiembre pasado, este siniestro llevó a la muerte de 17 pacientes del Hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicado en la colonia Centro del municipio. Las personas estaban contagiadas de COVID-19 y por la subida del agua carecieron de oxígeno y otros cuidados, toda vez que el nosocomio se quedó sin energía eléctrica, además de dejarlos atrapados.
Las intensas lluvias de aquella vez afectaron a 70 mil personas en Tlaxcoapan, Tula, Ixmiquilpan, Tezontepec, Chilcuautla, Tasquillo, Tlahuelilpan, Tepeji del Río y Mixquiahuala. El Valle del Mezquital ahora está en proceso de reparación por inundaciones.
López Obrador tomó nota de las peticiones, prometió atenderlas y aprovechó para hablar de la carretera de Agua Blanca hacia Metepec.
“Se requiere mejorar los caminos, este por el que transitamos ahora, de Agua Blanca a Metepec, pues urge, atenderlo, porque ya es un camino de terracería, ya no hay pavimento y tenemos qué empezar ya a trabajar”, exigió el mandatario y el gobernador soltó una risa nerviosa al verse exhibido por sus gestiones.
“Hay que ponerse de acuerdo con el gobierno del estado, ojalá que en unos días podamos empezar a trabajar y como hablábamos, iniciar un procedimiento nuevo, a ver si podemos hacer algo parecido a lo que se está haciendo en Oaxaca”.
La cercanía entre Omar Fayad y el presidente Andrés Manuel López Obrador ha destacado por las estrategias de combate al robo de combustible implementadas por el mandatario, así como por las obras del Aeropuerto Felipe Ángeles en Santa Lucía, Estado de México.
A diferencia de gobernadores como Enrique Alfaro de Jalisco, Francisco García Cabeza de Vaca de Tamaulipas o Silvano Aureoles de Michoacán, Fayad no se ha enfrentado públicamente contra el presidente de la república.
Desde el inicio del sexenio de AMLO, en 2018, el gobernador de Hidalgo le ha mostrado su respaldo constante. El mandatario ha declarado que mantiene buenas relaciones con el priista, pese a que es de un partido distinto.
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