Durante este lunes, la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) de Sonora reveló que se descubrieron restos óseos humanos en las inmediaciones del cerro El Chichiquelite, a las orillas de territorio yaqui, en el municipio de Cajeme. La localización ocurrió en un operativo conjunto de instituciones de seguridad estatales y federales.
A través de su cuenta de Twitter, la dependencia informó que en la búsqueda participaron agentes de la Fiscalía, la Guardia Nacional, las secretarías de Marina y de la Defensa Nacional y elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC).
“Se trabaja en la identificación científica de los restos”, declaró la FGJE.
Medios locales informaron que fuentes extraoficiales reportaron que podría tratarse de 10 hombres desaparecidos desde el 14 de julio. Siete de ellos son miembros de la etnia yaqui.
De acuerdo con las denuncias de sus parientes, habrían sido privados de su libertad y secuestrados en el pueblo Loma de Bácum, cerca de los ranchos El Coyote y Agua Caliente.
Miembros de la comunidad indígena en Loma de Bácum confirmaron, en una entrevista para La Jornada, que desde el domingo elementos de seguridad de distintas corporaciones arribaron a la sierra de su territorio. Declararon que hasta el momento no han sido notificados del hallazgo, y también aseguraron que han escuchado las detonaciones de posibles armas de fuego.
A finales de agosto, en Sonora, autoridades de indígenas yaquis denunciaron nuevamente la víspera, esta vez ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), al gobierno mexicano por su presunta complicidad con grupos de la delincuencia organizada en la desaparición de 10 miembros de la comunidad.
Y es que el pasado 19 de julio, mismas autoridades yaquis reportaron la desaparición de 10 habitantes y trabajadores de la región, después de que el Ejército mexicano llevara a cabo operativos en diversas propiedades.
En esa ocasión, los militares decomisaron más de una tonelada de metanfetamina, además de precursores químicos para elaborar droga, situación que generó una respuesta violenta de grupos criminales y que presuntamente provocó que se llevaran a varios indígenas yaquis.
El portavoz e integrante de la comunidad yaqui de Lomas de Bácum, Guadalupe Flores Maldonado, informó de que las autoridades han presentado el caso ante instancias internacionales contra el Gobierno de México.
En las denuncias señalaron que la desaparición de 10 integrantes de la etnia “no pudo haber ocurrido sin la complicidad de las agencias de seguridad e investigación que habían realizado los operativos y que estaban desplegados en la región”.
Asimismo, acusaron que en el pasado el gobierno los ha reprimido y por eso interpusieron las denuncias ante instancias internacionales.
“Siempre que se denuncia de manera local, en el estado o ante el gobierno no suelen proceder o nunca hay avances. En este caso si los hubieran matado ya los hubiéramos encontrado, pero no, nosotros creemos que los secuestraron y que el gobierno es cómplice”, señaló.
El portavoz recordó que el proyecto del Gasoducto Sonora es uno de los motivos por el que la etnia yaqui y el gobierno tienen diferencias, que han sido puestas sobre mesas de negociación en varias ocasiones, y señaló que un tramo de 18 kilómetros del proyecto atravesaría el territorio de la comunidad en Loma de Bácum.
Expuso que el 19 de julio, unos días después de la desaparición de los integrantes de la etnia, iniciaron el proceso de denuncia ante las autoridades internacionales.
SEGUIR LEYENDO: