El presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), afirmó que el balance de la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) fue “muy positivo”; esto a pesar de las fricciones generadas dentro de la reunión.

En ese sentido, el mandatario mexican señaló que las intensas confrontaciones que suscitaron entre algunos altos funcionarios es “parte de la pluralidad democrática”. No obstante, aseguró que todas las partes lograron concretar “acuerdos importantes” en materia de salud y seguridad.

“Hubo un buen encuentro a pesar de las diferencias; llevaba ya mucho tiempo que no se lleva a cabo una reunión así porque no había coincidencias, había confrontación” expresó el presidente de origen tabasqueño.

En la reunión se pudieron observar distintas reacciones en las que los gobiernos no se mostraban de acuerdo con el actuar de sus homónimos latinoamericanos. Sin embargo, para López Obrador esto fue circunstancial.

“Siempre he sostenido que la confrontación política es consustancial a la democracia. No podemos todos pensar de la misma manera. Lo importante es que en la diversidad podamos llegar a acuerdos. Y esto se logró”, aseveró en su conferencia de prensa matutina.

Una de las fricciones más importantes que se dio durante el CELAC fue la protagonizada por el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou y el mandatario Cubano Miguel Díaz-Canel quienes intercambiaron posturas.

Lacalle Pou dijo que cuando uno ve que “en determinados países no hay una democracia plena, no se respeta la separación de poderes, desde el poder se usa el aparato represor para callar protestas y encarcelar opositores, no se respetan los derechos humanos (...), debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, Nicaragua y Venezuela”.

Díaz-Canel también fue duro con la critica hacia su homologo y sentenció que los comentarios hechos por Lacalle mostraban su “desconocimiento de la realidad” y que no se acercaban a la realidad cubana.

Para responder al mandatario, Lacalle hizo uso de la canción “Patria y vida”. Esta melodía fue un referente al convertirse en un himno durante las fuertes protestas que se desataron en Cuba en julio contra el gobierno de Díaz-Canel.

“Quiero citar simplemente (...) es una canción muy linda que quienes la cantan se sienten oprimidos por el gobierno: ‘que no siga corriendo la sangre por querer pensar diferente, quién les dijo que Cuba es de ustedes si mi Cuba es de toda mi gente’”, comentó Lacalle Pou.

Ante el comentario, Díaz-Canel dijo que “parece que el presidente Lacalle Pou tiene muy mal gusto musical” y que la canción era “una mentira y una construcción entre algunos artistas en contra de la revolución cubana”.

Otro confrontamiento lo protagonizaron el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, y el mandatario Nicolás Maduro. Benítez dejó en claro que su presencia en el CELAC no significaba que reconociera el gobierno venezolano.

“Mi presencia en esta cumbre en ningún sentido ni circunstancia representa un reconocimiento al gobierno de Nicolás Maduro. No hay ningún cambio de postura de mi gobierno y creo que es de caballeros decirlo de frente”, dijo Abdo Benítez.

Sus palabras causaron la molestia del sucesor de Hugo Chávez, por lo que le respondió enérgicamente que cuando quisiera podían sentarse a hablar de democracia. También le extendió la invitación a Lacalle Pou.

“Le digo al presidente de Paraguay: ¡ponga usted la fecha, el lugar y la hora para un debate sobre la democracia en Paraguay, en Venezuela y América Latina! (...). ¡Ponga usted, presidente Lacalle, la fecha y el lugar!” expresó.

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