La violencia del crimen organizado no tiene freno en México, donde este fin de semana las ejecuciones y el fuego cruzado han dejando al menos 51 muertos. De estos cuatro sucedieron en el municipio de Piquito, Sonora, donde presuntos sicarios del Cártel de Sinaloa se enfrentaron con elemetos de las Fuerzas Armadas.
El choque se produjo alrededor de las 17:40 horas de este lunes, cuando las autoridades realizaban un recorrido de vigilancia. Los efectivos fueron emboscados por los gatilleros.
Según informó la SSP Sonora, del bando de los criminales cuatro resultaron abatidos, mientras que dos policías fueron heridos. Sin embargo, fuentes recogidas por medios locales elevan el balance de las víctimas.
En redes sociales circularon videos de los sicarios huyendo ante elementos de la Guardia Nacional. El episodio abrió un debate sobre la impunidad con la que opera el crimen organizado en la entidad.
El experto y analista en narcotráfico, Oscar Balderas, escribió en su cuenta de Twitter. “¿Qué debieron hacer los uniformados en desventaja numérica? ¿Disparar o negociar? ¿Atacar a lo suicida? ¿Morir en cumplimiento del deber? ¿Pensar en sus familias?”.
Como se observa, los sicarios que superan en número a los efectivos del cuerpo policíaco, se burlan de las autoridades al ver que no pueden enfrentarlos. En una segunda grabación, se muestra al convoy criminal desfilar impunes en la región de Piquitos.
Sonora, al norte de México, es escenario de una guerra cada vez más sangrienta entre organizaciones criminales y elementos de las Fuerzas Armadas. Conectado al sur con Sinaloa y fronterizo al norte con Arizona, EEUU, es un estado estratégico para el crimen organizado.
La liberación del capo legendario Rafael Caro Quintero, complicó aún más el escenario, desatando una guerra entre la organización criminal que dirige, el Cártel de Caborca; los remanentes del Cártel de Sinaloa, el grupo criminal Jalisco Nueva Generación, y La Línea.
El estado, azotado por la violencia, se hizo viral la semana pasada, luego de que medios locales y redes sociales hicieran viral el video en que un grupo de sicarios —a plena luz del día y sin la presencia de ninguna autoridad— dispararon contra tres jóvenes que se encontraban en la colonia Campestre, en el municipio de San Luis Río Colorado, Sonora.
Las grabaciones mostraban el momento en que dos gatilleros bajan de una camioneta y comienzan a disparar contra sus víctimas. En el sitio se encontraba un niño de aproximadamente tres años quien, ante el peligro, corrió para ponerse a salvo. De acuerdo con los reportes, dos de los jóvenes agredidos identificados como Héctor, de 18 años y Jordan, de 21, resultaron con heridas graves; mientras que Jesús, de 20, murió en el hospital. Los atacantes, según lo establecido por las autoridades, utilizaron armas AR-15, un fusil de asalto calibre 5,56 mm accionado por empuje y el más vendido en Estados Unidos.
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