Desde hace días en Calera, localizado en la región central de Zacatecas, el ruido de las balas enmudeció a los pobladores del municipio, quienes advierten que el crimen organizado los ha desplazado para extender su zona de control.
En un video difundido en redes sociales se muestra las huellas de la violencia de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Las grabaciones son enviadas por los mismos sicarios y algunas veces por los habitantes, quienes piden ayuda.
Cíclico, devastador, el drama de Zacatecas aparece y desaparece de los titulares de noticias sin que su ausencia implique periodos de paz. En los últimos meses, el Cártel de Sinaloa inició una batalla con la intención de arrebatarle el territorio a sus rivales del Cártel Jalisco Nueva Generación. En esa lucha, los muertos no siempre son del bando de los criminales. La violencia que azota a esta entidad ha trastocado a la policía zacatecana. De acuerdo con las cifras, este 2021 han sido 13 los agentes caídos en aparente cumplimiento del deber.
El peor de los crímenes contra uniformados ocurrió el pasado mes de junio, cuando fueron encontrados dos policías colgados en un puente vehícular. Se trataba de elementos originiarios de San Luis Potosí. Junto con los cuerpos se dejó una manta con un mensaje firmado por un cártel de las drogas.
La última escena de terror fue observada el pasado miércoles, en el municipio de Valparíso, donde fueron emboscados y asesinados tres elementos de la Policía Estatal y dos más resultaron heridos.
Los efectivos realizaban labores de inteligencia en la comunidad Boquilla del Refugio cuando fueron víctimas de una agresión armada.
Un video revelado por Imagen Noticias correspondiente al mes de septiembre del año pasado, muestra cómo un convoy de hombres armados, presuntamente miembros de Cártel de Sinaloa, levantan a dos agentes en la región de Jerez. En la grabación se observa cómo los gatilleros le cierran el paso a los uniformados, quienes afortunadamente fueron devueltos con vida.
Ese mismo mes, Infobae México informó que el miedo al crimen organizado había dejado sin policías al municipio de Juan Aldama (en Zacatecas)
El posible detonante del temor de los policías se originó el 19 de septiembre, cuando un comando irrumpió en la comandancia de Seguridad Pública del municipio, para asesinar al director de la corporación, Ricardo Barrón Guzmán, y a uno de sus subalternos.
El ataque ocurrió en la colonia Cerro del Agua. En un comunicado, el Grupo de Coordinación Local de Zacatecas detalló que un grupo criminal, no identificado, llegó a la sede de la Comandancia de la Policía y disparó a la gente que estaba ahí.
Los crímenes contra los uniformados ha provocado una ola de fuertes críticas hacia el gobierno, que están desbordadas ante el desafío del crimen organizado.
De acuerdo con la asociación civil Causa en Común, la cifra de agentes caídos en Zacatecas refleja las bajas en las corporaciones de seguridad pública de México, “convierte la labor policial en una profesión de altísimo riesgo, pues un policía tiene cuatro veces más probabilidad de morir asesinado que un ciudadano promedio”.
También advierte que las autoridades mantienen a los agentes en el abandono absoluto, sin presupuesto suficiente para comprar equipo y sin capacitación adecuada
El aumento en los asesinatos de policías en la entidad marca la llegada del Cártel de Sinaloa, según advierten expertos.
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