Drogas y excesos: cómo eran las fiestas de los Arellano Félix, líderes del Cártel de Tijuana

Este domingo, la FGR dictó auto de formal de prisión a Eduardo Arellano Félix, ex líder del cártel; el pasado 23 de agosto, autoridades federales de Estados Unidos entregaron al narcotraficante en el Puente Internacional de Matamoros-Brownsville

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Aunque en aquella época las organizaciones criminales mantenían un perfil público bajo, los hermanos siempre hicieron gala de una vida de excesos, violencia y ostentación (Foto: Archivo/Cuartoscuro)
Aunque en aquella época las organizaciones criminales mantenían un perfil público bajo, los hermanos siempre hicieron gala de una vida de excesos, violencia y ostentación (Foto: Archivo/Cuartoscuro)

Este domingo 29 de agosto, la Fiscalía General de la República (FGR) informó que el juez Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de México, Enrique Beltrán Santes, dictó auto de formal prisión contra Eduardo Arellano Félix, ex líder del Cártel de Tijuana, por el delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud.

Y es que el clan de los Arellano Félix ya se encuentra lejos de sus momentos de mayor poder criminal. Esta organización que creció en los años ochenta al abrigo de su tío, Miguel Ángel Félix Gallardo, consolidó su control en la frontera de Tijuana, Baja California, al norte de México, como un poder criminal autónomo de las otras familias mexicanas de la droga.

Aunque en aquella época las organizaciones criminales mantenían un perfil público bajo, los hermanos siempre hicieron gala de una vida de excesos, violencia y ostentación.

Quien se atreviera a quejarse del ruido de las fiestas era amenazado y, si persistía, asesinado (Video: Archivo)

Los Arellano Félix, llegados de Guadalajara, promovieron con sus eventos abiertamente las adicciones a las drogas. Organizaban fiestas escandalosas en las que invitaban a personas adineradas y les regalaban un cóctel de drogas como cocaína, marihuana y heroína.

Quien se atreviera a quejarse del ruido de las fiestas era amenazado y, si persistía, asesinado. Según los conocedores de aquella época, una torre de departamentos, localizada en la Zona Río, fue abandonada por sus inquilinos debido a los desmanes ocasionados por los juniors.

Los Arellano Félix eran comandados por Ramón Arellano, conocido como el más violento del clan. “Si le sonreías y estaba de malas, te mataba; si no lo saludabas, también te mataba”, según reveló uno de sus sicarios.

El narcotraficante, encarcelado en la prisión de alta seguridad del Altiplano, participó por videoconferencia en la audiencia, en la que “se reservó su derecho a declarar”, detalló la Fiscalía (Foto: Twitter/@guti_remo1982)
El narcotraficante, encarcelado en la prisión de alta seguridad del Altiplano, participó por videoconferencia en la audiencia, en la que “se reservó su derecho a declarar”, detalló la Fiscalía (Foto: Twitter/@guti_remo1982)

Ramón cayó en 2002 ante las balas de un policía judicial de Sinaloa. En pleno carnaval de Mazatlán, y en medio del asesinato del cardenal Posadas, a quien los Arellano Félix habrían asesinado tras confundirlo con el Chapo Guzmán, el mayor del CAF se ocultaba en el bastión del Cártel de Sinaloa.

El violento hombre llegó discretos en un Volkswagen, sin joyas ni ropa llamativa, como era su estilo. Tenía la intención de asesinar a Ismael Zambada García, pero fue él quien terminó ejecutado.

Menos de un mes después de la muerte de este narco, Benjamín Arellano Félix fue detenido en una zona residencial de Puebla. El capo cedió a la detención sin balas ni escándalos.

Organizaban fiestas escandalosas en las que invitaban a personas adineradas y les regalaban un cóctel de drogas como cocaína, marihuana y heroína (Foto: Infobae México)
Organizaban fiestas escandalosas en las que invitaban a personas adineradas y les regalaban un cóctel de drogas como cocaína, marihuana y heroína (Foto: Infobae México)

Muerto Ramón y preso Benjamín, el poderío del Cártel de los Arellano Félix se dividió. La parte de la operación criminal a Francisco Javier Arellano Félix, El Tigrillo, y la situación financiera y el lavado de dinero a Enedina Arellano Félix.

Al mayor de los hermanos Arellano Félix, Francisco Rafael, lo ejecutaron en una fiesta. En 2013 organizó un evento al que acudieron políticos, deportistas y familiares. Un sicario disfrazado de payaso entró al exclusivo festejo y le mató de disparos a la cabeza. Las autoridades presumen que se trató de un ajuste de cuentas por parte de José Rodrigo Aréchiga Gamboa, El Chino Ántrax, para mostrar su lealtad a Ismael El Mayo Zambada del Cártel de Sinaloa.

La cocaína y la marihuana de este clan llegó hasta San Diego, Los Ángeles, Las Vegas, Chicago y Nueva York, en Estados Unidos. En el país a los estados de Baja California, Baja California Sur, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán y Guerrero.

Eduardo Arellano Félix fue detenido en 2008 en Tijuana, Baja California, para ser posteriormente extraditado a los Estados Unidos en 2012 por numerosas acusaciones de diversos delitos (Foto: EFE/Abraham Pineda)
Eduardo Arellano Félix fue detenido en 2008 en Tijuana, Baja California, para ser posteriormente extraditado a los Estados Unidos en 2012 por numerosas acusaciones de diversos delitos (Foto: EFE/Abraham Pineda)

Los enfrentamientos de los Arellano Félix con Joaquín Guzmán Loera y con Héctor El Güero Palma fueron constantes. Posteriormente se enemistaron con Ismael El Mayo Zambada. Hubo desde asesinatos de familiares, mujeres y niños, hasta los más públicos en Guadalajara y Puerto Vallarta, Jalisco. Incluso cuando en 2002 habían planeado asesinar a El Mayo en Mazatlán, el 10 de febrero cayó muerto Ramón Arellano Félix.

En cuando a Eduardo Arellano Félix, mejor conocido como El Doctor, “el auto de formal prisión es una resolución que fija la litis en el proceso penal, pues precisa tanto el delito por el que se va a continuar el proceso, como los hechos a los que se va a limitar la causa penal”, define la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El narcotraficante, encarcelado en la prisión de alta seguridad del Altiplano, participó por videoconferencia en la audiencia, en la que “se reservó su derecho a declarar”, detalló la Fiscalía.

La casa abandonada de Eduardo Arellano Félix: así luce el hogar del presunto narco del Cártel de Tijuana (Foto: YouTube/@Rayito)
La casa abandonada de Eduardo Arellano Félix: así luce el hogar del presunto narco del Cártel de Tijuana (Foto: YouTube/@Rayito)

El pasado lunes 23 de agosto autoridades federales de Estados Unidos entregaron a El Doctor a sus homólogos mexicanos en el Puente Internacional de Matamoros-Brownsville. Posteriormente quedó bajó custodia de la FGR y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y fue trasladado al Centro Federal de Readaptación Social número 1 “Altiplano”, en Almoloya de Juárez, Estado de México.

Eduardo Arellano Félix fue detenido en 2008 en Tijuana, Baja California, para ser posteriormente extraditado a los Estados Unidos en 2012 por numerosas acusaciones de diversos delitos, respecto a lo cual las autoridades de ese país ofrecían una recompensa de USD 5 millones (100 millones de pesos al tipo de cambio de hoy, aproximadamente).

Fue condenado a 15 años de cárcel y, en razón de su cooperación con las autoridades de ese país, fue condenado sólo por dos de los siete cargos por los que había sido acusado en su extradición.

Fue condenado a 15 años de cárcel y, en razón de su cooperación con las autoridades de ese país, fue condenado sólo por dos de los siete cargos por los que había sido acusado en su extradición (Foto: EFE/SSP)
Fue condenado a 15 años de cárcel y, en razón de su cooperación con las autoridades de ese país, fue condenado sólo por dos de los siete cargos por los que había sido acusado en su extradición (Foto: EFE/SSP)

Después de cumplir esa parte de condena en una prisión federal de baja seguridad en Allentown, Pensilvania, las autoridades migratorias de Estados Unidos (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas), pusieron a disposición de las autoridades mexicanas al presunto criminal.

Como consecuencia de las luchas internas, arrestos y muertes de sus más importantes líderes, el Cártel de Tijuana es tan sólo un vestigio de lo que alguna vez llegó a ser en los años noventa y comienzos del siglo XXI, cuando era considerado una de las organizaciones criminales más violentas y poderosas de México.

También conocido como el Cártel de los hermanos Arellano Félix, monopolizó durante la década de los noventa y principios de los dosmiles las rutas de tráfico de drogas. Su imperio duró más de 20 años y se extendió su presencia en casi toda la república; sin embargo, su principal punto de operaciones se determinó en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California.

Benjamín Arellano Félix, hermano del Doctor y también líder del grupo, fue extraditado desde México en abril de 2011 y sentenciado a 25 años de prisión en una corte federal de San Diego en abril de 2012. Francisco Javier Arellano Félix, el primer cabecilla del cártel en caer, cumple una condena de cadena perpetua tras su captura en 2006 por la Guardia Costera de EEUU.

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