Al ex candidato presidencial del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, no se le investiga por recibir dinero a cambio de un voto en el Congreso, sino por “corrupción para entregar bienes de la Nación”.
Así lo declaró este viernes Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), durante una mesa de trabajo organizada por los senadores de Morena.
Al ser cuestionado sobre el tema y sin mencionar su nombre, el funcionario apuntó que el político panista es copartícipe de una “inmensa colusión” que dañó a toda América Latina y a México, como lo fue el caso de corrupción de la petroquímica brasileña Odebrecht.
“Hemos podido ir probando con toda precisión ante los jueces que no es el caso de una persona que recibió el dinero o que votó en un sentido. No. Es el caso de una corrupción a nivel del Estado para entregar los bienes de la nación a cambio de recibir prebendas, de recibir contratos, de recibir dinero [...] Es, quizá, uno de los escándalos en contra de la integridad y del patrimonio de nuestro país más importantes”
El titular de la FGR aseguró que seguirán adelante en este caso, pese a quienes realizan lo que consideró una “defensa deleznable” del caso contra el ex candidato.
“No es como lo quieren plantear, quienes están haciendo una defensa que me parece que es francamente deleznable. Esto es un asunto de fondo, esto es un asunto de la nación mexicana y es un asunto del patrimonio de todos nosotros”
La indagaciones iniciaron luego de que Emilio Lozoya, ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex) y hoy testigo protegido, aseguró haberle entregado a Ricardo Anaya 6 millones 800 mil pesos para votar a favor de la reforma energética “que privatizaría la producción petrolera mexicana”.
“Según consta en diligencias ministeriales, dicha cantidad le fue entregada a Ricardo Anaya por una persona de confianza del propio Emilio Lozoya, cuyo nombre es Norberto “N”, (…) en las instalaciones de la Cámara de Diputados, en el año 2014″, se indicó en un comunicado de la FGR emitido el pasado 25 de agosto.
De acuerdo con Miguel “N” y Froylán “N”, otros testigos de la Fiscalía, en ese entonces se presenciaron diversas visitas del panista y otros legisladores a las oficinas de Lozoya, en la Dirección General de Pemex; lo cual quedó asentado en diligencias ministeriales.
La FGR puntualizó que dicho monto corresponde a su vez de un primer pago por 10 millones de dólares hecho a modo de soborno al ex director de Pemex por Hilberto “N”, Marcelo “N”, Luiz “N” y Luis “N”, altos funcionarios de Odebrecht Brasil.
La dependencia señala que los hechos que involucran a Anaya en el caso evidencian una “línea clara de hechos delictivos” que tuvieron por objeto entregar el patrimonio petrolero del país a intereses y a empresas extranjeras.
Al respecto, el político queretano consideró que en la Fiscalía son unos “incompetentes”, ya que su voto a favor de la reforma “fue ocho meses antes de la supuesta entrega” de dinero denunciada por Lozoya Austin.
Un juez federal pospuso hasta el 4 de octubre la audiencia inicial contra el excandidato presidencial panista.
El exilio
Días atrás, Anaya anunció su “exilio” por lo que considera una “persecución política” del presidente Andrés Manuel López Obrador, contra quien perdió en las elecciones de 2018.
Sin embargo, el Instituto Nacional de Migración (INM) informó el jueves que en realidad Anaya lleva fuera del país desde el pasado 5 de julio, presuntamente en Texas, Estados Unidos.
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