Luego de que el excandidato a la presidencia de la República, Ricardo Anaya, diera a conocer que saldría del país para aclarar su situación jurídica ante las acusaciones del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, el vocero de Andrés Manuel López Obrador, Jesús Ramírez Cuevas, defendió al gobierno del tabasqueño asegurando que en la actual administración “no hay persecución política”.
A través de su cuenta de Twitter, el funcionario aclaró otro par de cosas, pues señaló que en el gobierno de la llamada cuarta transformación “no hay represión y tampoco el poder judicial está sometido al poder ejecutivo”.
Por último, terminó su mensaje recordando que “el que nada debe, nada debe temer”, haciendo referencia al proceso judicial que enfrenta el panista.
“En este gobierno no hay persecución política, no hay represión y tampoco el poder judicial está sometido al poder ejecutivo. Así que el que nada debe, nada debe temer”
De acuerdo con la denuncia de Anaya Cortés, López Obrador lo quiere meter a la cárcel, con testigos “balines”, porque no quiere que sea candidato presidencial en 2024.
“Con la novedad de que AMLO me quiere meter a la cárcel, con mentiras y dos testigos balines. La razón de fondo: no quiere que sea candidato en 2024, y le molestan mucho mis críticas. Hazle como quieras, Andrés Manuel, no me voy a detener. Yo sigo en la lucha por un México mejor”, manifestó en redes sociales.
También acusó que el mandatario lo quiere “fregar a la mala”, pues le estorba para sus planes de sucesión en 2024. “No quiere que yo sea candidato, y me quiere encarcelar que no le gusta lo que digo, está enojado por los videos que publico cada semana”.
En tanto, aseguró que hay otro argumento para perseguirlo que lo que dice en su declaración el “corrupto y mentiroso” de Lozoya. “Ahora, el pretexto es lo de menos, dicen que la verdad no peca pero incomoda, a López Obrador le incomoda que señalemos sus estupideces, que los niños con cáncer no tienen medicinas, que su reforma eléctrica destruye el medio ambiente, que fracasó en lo que él nos dijo que era su principal objetivo, provocó que aumentara la pobreza, y sobre todo, ¿saben qué es lo que más le molesta? que le recordemos que su principal promesa, la de acabar con la corrupción, resultó un fraude, una verdadera vacilada”, añadió.
Para defenderse, Anaya Cortés se abocará a reunir pruebas, por lo cual estará fuera una temporada. “A ese nivel se está degradando la política en México, y por ahora no hay de otra, porque si me dejo, me van a quitar mis derechos políticos, y me van a quitar la posibilidad de ser candidato en tres años”, informó.
Por su parte, el presidente López Obrador negó las acusaciones del panista y dejó claro que la venganza no es su fuerte. En este sentido, consideró que este debe responder a las acusaciones en su cuenta con argumentos sólidos y con “la fuerza de la verdad”.
El tabasqueño concluyó su aclaración indicando que ahora, “puede haber políticos presos pero no presos políticos”.
“No tengo nada que ver con la persecución que supone Ricardo Anaya. No es mi fuerte la venganza. Si la Fiscalía y el Poder Judicial lo acusan de corrupción y es inocente, que no se ampare ni huya; que se defienda con pruebas y con la fuerza de la verdad. Ya no es el tiempo de antes: puede haber políticos presos pero no presos políticos”
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