La Fuerza Aérea Mexicana anunció que a partir de los primeros días de julio se bombardearán las nubes que se formen en Sonora con yoduro de plata. Esto servirá para aumentar las probabilidades de lluvias y así, hacer frente a la sequía extrema que se está viviendo en la entidad.
De acuerdo con el diario El Heraldo, el capitán Zacarías Estrada Vega, vocero de la Base Aérea número 18, explicó que en el estado de Baja California se tuvieron que usar estas medidas, las cuales funcionaron con éxito. Por otra parte, esta medida se comenzó a utilizar también en Nuevo León y Sinaloa.
Para ello se utilizarán aviones King Air 350i, los cuales estarán equipados por los tanques de yoduro de plata. Cada nave será tripulada por dos pilotos del ejército y un técnico para manejar el químico, y se espera comenzar ya durante la primera quincena de julio.
El capitán declaró que al esparcir el yoduro de plata en las nubes con potencial de lluvia, el pronóstico se incrementa entre un 30 y 40 por ciento. No obstante, todo depende del pronóstico meteorológico, pues antes de ser rociadas con las sustancias, las nubes deben de cumplir ciertas condiciones.
Agregó que las nubes se deben atacar cuando estén en la parte de la sierra, para que cuando el químico haga efecto, la lluvia se localice dentro del estado. Por eso se debe monitorear la actividad climática de la entidad. Si este plan funciona se podría impactar un total de dos millones de hectáreas de Sonora con las lluvias, además de recargar las cinco cuencas y siete presas del estado.
Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua) la sequía en Sonora ha impactado a sus 72 municipios, de los cuales 42 sufren sequía extrema y 23 sequía excepcional. Es por eso que es urgente tomar este tipo de medidas, pues ayudarán a humedecer la tierra, recargar pozos, a que crezcan los pastizales para alimento del ganado y también obtener más presencia de agua en presas, aguajes y riachuelos, las cuales son fuentes de abastecimiento para las principales ciudades del estado.
Se advertía una situación grave
Una situación preocupante y complicada, fue como describió en febrero pasado Jorge Zavala Hidalgo, coordinador general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el estado de las principales presas de México debido a la falta de lluvias. Estas registraron en los meses anteriores un déficit de 19.8 por ciento.
Durante una reunión del Comité Nacional de Grandes Presas, Zavala Hidalgo señaló que el grado de sequía en el territorio nacional aumentó de 79.12 a 80.43%, entre el 31 de enero y el 15 de febrero.
Tal es el impacto que, Luis Antonio Aguilar Meza, subgerente de Aguas Superficiales e Ingeniería de Ríos de la Conagua dio a conocer que 83 de las 210 presas más importantes del país se encuentran a menos de 50% de llenado y menor a la normal histórica, mientras que sólo tres presas se encuentran por arriba del 100% de almacenamiento.
Agregó que 56 están entre el 75 y 100%, así como 57 presas entre el 50 y 75% de llenado y 11 presas menor a 50%, lo que suma un déficit total de 7 mil 85 millones de metros cúbicos de agua.
Por su parte, Víctor Bourguett Ortiz, director general del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM) de la Conagua, detalló que las presas El Bosque, Villa Victoria y Valle de Bravo, del Sistema Cutzamala, continúan con niveles a la baja, ya que su almacenamiento promedio es de 54.2 por ciento.
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