Cada 30 de abril, las escuelas y las casas en México se llenan de un colorido especial. Ya sea desde un juguete hasta una felicitación, los infantes son el centro de atención, pues se celebra el Día del Niño. Y aunque, este es el segundo año en el que los menores no pueden reunirse con sus amigos del colegio o de la calle, por la pandemia de Covid-19, el origen de esta fecha tiene una historia digna de contar.
Después de la Primera Guerra Mundial y todas las consecuencias terribles que trajo para aquellos que residían en Europa, en 1924, países de todo el mundo comenzaron a tomar conciencia sobre la necesidad de proteger la integridad de las infancias.
Es por esto, que, de acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en dicho año -siendo presidente del país Álvaro Obregón y José Vasconcelos, ministro de Educación Pública- se instauró que el 30 de abril se conmemoraría a los niños.
Lo anterior con la finalidad de reafirmar los derechos de los niños y que estos pudieran crecer en un entornos saludable, digno y feliz.
En ese mismo sentido, Álvaro Obregón instó a las instituciones para que fueran empáticas y comprensivas con este sector de la población y ahondó en la necesidad de desarrollar actividades para que sus derechos estuvieran garantizados.
“José Vasconcelos decía que había que hacer de cada escuela “un palacio con alma”, para que los niños pobres, descalzos y hambrientos vivieran en palacios las mejores horas de su vida y guardaran recuerdos luminosos”, menciona la CDNH.
En cuanto a los derechos que tienen las infancias en territorio mexicano, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece el derecho a: la vida, educación, alimentación, salud, agua, identidad, libertad y protección.
Sin embargo, este día no sólo se conmemora en México, sino que en 20 de noviembre de 1959, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó esta fecha como el Día Internacional del Niño, pues en dicha fecha también se aprobó la Declaración de los Derechos del Niño y la Convención sobre los Derechos del Niño.
Nuestro país suele celebrar el Día del Niño en la misma fecha que Chile. Sin embargo, en el resto de los países latinoamericanos hay otras fechas. En el caso de Paraguay es el 31 de mayo. En Colombia es el último sábado de abril. Por su parte, México, lo festeja el último día de ese mes. En Venezuela es el tercer domingo de junio, en Uruguay es el 9 de agosto y en Brasil el 8 de octubre.
Infancias y pandemia por COVID-19
Aunque esta fecha conmemorativa tiene más de 50 años existiendo, ante el contexto de emergencia sanitaria por la pandemia de Sars-CoV-2, las dinámicas de convivencia entre los infantes se han tenido que modificar durante estos últimos años.
Desde marzo de 2020, las escuelas cerraron sus puertas y las clases se volcaron al ámbito virtual. Lo cual ha hecho que los menores tengan que adaptarse a la carencia de contacto con sus amigos o a las tradicionales celebraciones de días festivos.
En fechas recientes, la Secretaría de Salud (SSa) informó que a pesar de que los casos por Covid-19 van a la baja en México, no se puede descartar que -en caso de que se realicen celebraciones presenciales por el día del niño o de la madre- pueda haber nuevamente un alza de contagios.
“Los repuntes por festejos del Día del niño, del Día de las Madres, etcétera, por lo que no se descarta que esto también pueda tener una repercusión importante en un incremento en el número de casos de Covid”, puntualizó en la habitual conferencia de prensa, Ricardo Cortés Alcalá, Director de Promoción a la Salud.
Ante esto, el funcionario recomendó quedarse en casa y atender las recomendaciones de prevención, como: lavado frecuente de manos, ventilar espacios, usar adecuadamente el cubrebocas, entre otras.
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