En el Cártel de Sinaloa sobran los herederos y sucesores. Tras una posible detención o muerte de Ismael Zambada García, el “Mayo” —el capo supuestamente con más poder dentro de la organización criminal—, el protagonismo obligado es para sus hijos, ubicados en el mismo nivel jerárquico que Los Chapitos, descendientes de su socio, Joaquín el “Chapo” Guzmán.
El “Mayo”, sucesor natural de Guzmán Loera, es un capo prudente que ha logrado algo insólito. A sus aproximadamente 70 años nunca ha estado en prisión, mientras sus socios han ido cayendo uno detrás de otro. Sin embargo, lo que parece cada vez más claro, es que el tiempo sigue su curso y la hora del líder criminal podría estar cerca.
Los herederos
Los hijos de Zambada están catalogados por las autoridades como piezas clave de la estructura criminal. A su corta edad, Ismael Zambada Imperial, Vicente Zambada Niebla, el “Vicentillo” y Serafín Zambada Ortiz, el “Saráfo” iniciaron en el manejo de negocios y la red de vínculos para el lavado de dinero. Pero la adversidad los alcanzó en los últimos años.
El “Vicentillo”, de 45 años hoy día, fue sentenciado en Chicago a 15 años de prisión por conspirar para distribuir droga en EEUU. El primogénito del Mayo Zambada fue uno de los cooperantes estrella en el juicio a Joaquín el “Chapo” Guzmán. También facilitó a la Agencia Antidrogas de EEUU (DEA) información clave de organizaciones rivales.
Por todo lo anterior, el capo quedará en libertad en tres años. Según el periodista y autor del libro Cártel Chilango, Antonio Nieto, el narco —arrestado en México a comienzos de 2009 y extraditado a EEUU en febrero de 2010— estaría reagrupando fuerzas para operar en la Ciudad de México.
El regreso de Zambada Niebla a México podría ser fatídico, pues en su extraordinaria cooperación con las autoridades estadounidenses, el narco facilitó información sobre los líderes del Cártel de Sinaloa y la organización de los hermanos Beltrán Leyva.
El otro Zambada, el “Mayito Gordo”, capturado en 2014 por la Marina Armada de México, en un operativo en la sindicatura de El Salado, en Culiacán (Sinaloa), se encuentra a la espera de un juicio en Estados Unidos.
De acuerdo con el semanario Río Doce, cumplido un año en las prisiones americanas, el Mayito Gordo solo ha tenido dilaciones en su proceso luego de que se asegurara que el presunto capo habría contraído COVID-19.
El Jefe de jefes
La carrera criminal de Zambada despuntó a mediados de los ochenta, cuando su cuñado, Antonio Cruz, era un narco importante en Los Ángeles, EEUU, que traficaba en Las Vegas y otras ciudades. Sin embargo, lo detienen en 1977 y es ahí, cuando por primera vez, el apellido de los Zambada aparece en expediente criminales en EEUU.
“Antonio Cruz que ni siquiera está en el radar de nadie en México, que se casó con la hermana de `El Mayo´. Su cuñado era un importante narcotraficante de heroína, que primero fue un policía cubano en el régimen de Fidel Castro y que después emigra a Miami, y que intenta ser un importante narcotraficante en Estados Unidos. Es detenido y después emigra a México, conoce a la hermana de Zambada cuando Vicente Zambada, cuando su familia está en la pobreza total. Cuando él ( El Mayo Zambada) tenía que lavar las llantas de los camiones que entraban al ingenio azucarero que estaba en las inmediaciones de Culiacán. Cuando no tenía ni con qué mantener a su familia, es ahí cuando llega este cubano a cambiarles la vida la familia Zambada”, contó la periodista Anabel Hernández a Infobae México, en el marco de la presentación de su libro ´El Traidor´.
Hernández señala que está historia no era conocida. Ella la pudo saber de primera mano gracias al diario del Vicentillo y posteriormente con sus investigaciones que hizo para comprobar lo que leyó en el documento.
“Estamos hablando de la década de los 70, en esa época efectivamente sí se hace (El Mayo) un narcotraficante importante en Los Ángeles, operando para su cuñado el cubano, que era el gran narco en Las Vegas y en otras ciudades. De Los Ángeles se va bajando a Tijuana y establece un corredor, que era el que utilizaba para traficar toda esa droga para su cuñado. Después Antonio Cruz, en 1977 cae en prisión y es ahí cuando por primera vez sale el apellido Zambada en los expedientes criminales de Estados Unidos”.
“Después se cambia a Tijuana y se queda un largo tiempo viajando entre Tijuana y Los Ángeles. Luego estaría asociado con los hermanos Arellano Félix. Comienzan a tener una guerra, le dan la espalda, le dicen tú ya no eres el jefe y atentan contra la vida de su hijo en 1991. Es ahí cuando `El Mayo decide desplazar su imperio a Culiacán”.
“El Mayo” Zambada: jefe de jefes de los narcos mexicanos: “Él decidía quién vivía y quién moría”.
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