El nuevo Hospital de Tláhuac del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) sufrió un retraso en la recepción de enfermos en su primer día de operaciones. Esto, después de que hubieran llegado 24 pacientes en una hora.
El doctor Ramiro López Elizalde, director Normativo de Salud del ISSSTE, le dio a Grupo Imagen una entrevista. En esta reveló que la madrugada del martes este retraso se dio después de que hubo un fenómeno poco usual.
En un periodo de 60 minutos llegaron 20 pacientes con síntomas leves de COVID-19 y otras cuatro personas cuyas situaciones eran aún más riesgosas. De estas últimas, una tenía un infarto al corazón; otra un infarto cerebral; una persona con un trauma de cráneo y finalmente alguien más con descompensación severa por diabetes.
López Elizalde narró que se les dio prioridad a las cuatro personas cuyas vidas estaban en peligro, por lo que los 20 pacientes tuvieron que permanecer en la sala de espera, mientras la trabajadora social atendía a los familiares de los pacientes más graves.
“Cuando tienes una situación así arriban al mismo tiempo una gran cantidad de personas, es muy difícil contener al mismo tiempo, dar la atención que pudiera ser cuando es de una manera gradual”, dijo a la televisora.
López Elizalde agregó que gracias al sistema de triage, que es utilizado en todos los hospitales, se determinó la urgencia para los pacientes.
“Se priorizó y se les pidió a los pacientes que estaban en ese momento estables que pudieran esperar, que pudieran estar sentados en la sala de espera. De tal manera las fotos que están circulando, el vídeo, se nota ahí pacientes que están, descansando o que están acostados, esperando la atención. Sí se ve un tanto alarmante porque tienen el tanque de oxígeno”, añadió.
También explicó que a quienes se puede ver en el video que ronda en redes sociales, es a los familiares de los pacientes. Ellos pudieron estar por única ocasión con los pacientes, mientras recibían atención para tener una cama.
Una hora más tarde, la recepción se normalizó, no obstante, el problema es ahora con los hospitales privados. Esto debido a que ellos han enviado a pacientes COVID-19, pero no han tratado de comunicarse directamente con ellos para saber si sí podrán ser recibidos.
Una apertura en una emergencia
La semana pasada la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que a partir del lunes 21 de diciembre el nuevo Hospital General de Tláhuac del ISSSTE iniciaría operaciones.
En el recorrido del sábado pasado por las instalaciones del recinto médico, la mandataria estuvo acompañada del director del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez, del titular de la Secretaría de Salud (SSa), Jorge Alcocer Varela, el director del Insabi, Juan Antonio Ferrer y el titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo.
El grupo celebró el trabajo directivo de la jefa de Gobierno. Señalaron que ha logrado coordinar todos los institutos de salud para que trabajen en equipo durante la crisis sanitaria, atendiendo conjuntamente a todos los pacientes con COVID-19.
La mandataria señaló que debido a la emergencia que atraviesa la capital, el Hospital General Tláhuac comenzará recibiendo a 120 pacientes infectados con el virus SARS-CoV-2, ampliando de esta forma la capacidad hospitalaria de la entidad.
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