Una mujer, presuntamente embarazada, sorprendió esta tarde del 21 de octubre al personal que labora en el Hospital General Balbuena al resultar ser una polizona que intentó extraer varios objetos de valor del nosocomio.
De acuerdo al periodista Carlos Jiménez, la mujer identificada como Claudia “G”, de más de 30 años de edad, fue detenida por miembros de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, del Sector Congreso de la Unión, cuando intentaba darse a la fuga.
Como parte del protocolo de acción los agentes de la policía, la mujer fue cateada. En la labor, los uniformados encontraron un teléfono celular, una cartera, un estuche médico, un oxímetro, un rosario, una cada de medicamentos, y por lo menos 700 pesos en efectivo, objetos que supuetsamente pertenecerían a los médicos del lugar.
Tras ello, los agentes de la SSC la presentaron ante la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina para que las autoridades pertinentes determinaran su situación legal.
Según los primeros reportes, Claudia “G” pretendió tener una cita en el Hospital, ubicado en Cecilio Robelo y Sur 103, Colonia Aeronáutica Militar, en la alcaldía Venustiano Carranza, para pasar desapercibida mientras extraía objetos de valor.
Cabe recordar que al inicio de la pandemia el Hospital Balbuena fue uno de los nosocomios que padeció la falta de insumos médicos para proteger al personal que trató a los pacientes que llegaban enfermos de coronavirus (COVID-19).
Fue en abril de este 2020, cuando enfermeras denunciaron a los medios que habían gastado hasta 5 mil pesos para comprar su propio equipo de protección.
Para el 13 de ese mismo mes, el personal protestó en las inmediaciones del nosocomio para demandar insumos médicos suficientes y la realización de un tiraje adecuado para identificar los casos de COVID-19.
Además, demandaban que en la parte del helipuerto del Hospital, que depende del Gobierno capitalino, se habilitara un hospital inflable para atender a casos que surgieran de coronavirus, pues aunque no era un recinto para COVID-19, llegaron a atender casos de neumonías atípicas.
“El poco material que existe es de muy mala calidad”, había externado una enfermera durante la manifestación.
Durante los primeros meses de la pandemia el personal médico se manifestó a lo largo de México para exigir a las autoridades equipo de protección y condiciones de trabajo dignas. Sin embargo, hacia los meses de agosto, septiembre y octubre, las demandas han disminuido considerablemente.
En parte, porque las autoridades lograron sumar cubrebocas, batas, caretas, respiradores, pruebas de detección, entre otros objetos, a la lista de artículos que antes de la pandemia no tenía la SSa en su inventario.
Es decir, conforme fueron llegando los cargamentos de compras y donaciones del extranjero, las autoridades federales comenzaron a repartirlos en los nosocomios de todo el país, para proteger al personal médico que ha estado en la primera línea de combate del coronavirus.
El pasado 14 de octubre el director general de Epidemiología, José Luis Alomía Zegarra informó que en México han muerto 1,744 médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por coronavirus y que había 164 defunciones sospechosas.
Asimismo se reportaron 230,844 casos negativos; 21,219 casos sospechosos acumulados y 127,053 confirmados acumulados. En tanto, había 3.089 casos activos, es decir, contagios detectados en los últimos 14 días.
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