El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que hay gente infiltrada que utiliza el movimiento feminista para atacar a su gobierno.
“Los que están molestos porque se dedicaban a robar, a saquear, los corruptos, pues también se disfrazan de feministas cuando no lo son”, dijo en su conferencia mañanera del pasado 25 de septiembre.
Ante ello, diversas feministas del país, conocidas por su labor en la materia y autodenominadas “independientes e integradas a colectivas”, iniciaron la campaña #LaInfiltradaSoyYo, como respuesta a las declaraciones del primer mandatario.
“Señor presidente, Andrés Manuel López Obrador: a los ojos del patriarcado, confesamos que sí, las feministas somos unas infiltradas. Nos hemos infiltrado en las escuelas y en las universidades; en los gobiernos estatales y municipales; en el gobierno federal, cuidado, presidente, puede tener cerca a una infiltrada”, expresan en un video que forma parte de la campaña.
A esta iniciativa se han sumado activistas e investigadoras como María Salguero, Patricia Claudia Calvin, Olamendi, Jacqueline L’Hoist, Yndira Sandoval, Martha Tagle, entre otras.
“Yo estoy infiltrada en el movimiento feminista desde 2010 @jenarovillamil y conoces mi trabajo #LaInfiltradaSoyYo”, contestó María Salguero a Jenaro Villamil, quien respaldó la declaración de López Obrador.
Recientemente el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reveló que 2,240 mujeres fueron asesinadas, durante los primeros siete meses del año, en México: la cantidad representa un aumento de 3.1% en comparación con el mismo periodo de 2019.
La cifra de víctimas se desglosa en 1,674 casos de homicidios dolosos y 566 feminicidios, según la Información sobre violencia contra las mujeres (Incidencia delictiva y llamadas de emergencia 9-1-1) publicado el pasado 25 de septiembre.
De los feminicidios registrados este año, 80 acontecieron en el Estado de México, lo que lo mantiene como el estado más peligroso del país para las mujeres.
En segundo lugar se encuentra Veracruz con 52 feminicidios, y le siguen la Ciudad de México con 41 casos, Nuevo León con 39, Puebla con 38, Jalisco con 33, Morelos con 25, Oaxaca y Baja California con 21 casos cada uno, y San Luis Potosí y Chihuahua con 20 cada uno.
Las 2,240 muertes de mujeres, en estos siete meses, representa un promedio diario de 10.5 casos.
Esta situación en México, ha propiciado que cientos de mujeres dejen de lado el confinamiento por la pandemia de coronavirus y salgan a existir justicia por aquellas que fueron asesinadas.
Tan sólo este fin de semana, se dieron a conocer los asesinatos de Jessica en Morelia, Michoacán; Alondra en Coahuila; Nayeli en Chiapas; y Carmen en Zacatecas. Al momento, en ninguno de los casos hay detenidos, según las autoridades continúan investigando para encontrar a los culpables.
En el caso de Jessica, recientemente se había graduado como profesora de educación básica y comenzaba su carrera en el Colegio Salesiano Anáhuac en la ciudad de Morelia, pero por la contingencia sanitaria impartía clases virtuales a un grupo de alumnos del estado de Guanajuato.
Familiares y amigos se movilizaron a través de redes sociales para organizarse, tomar las calles de Morelia y exigir su aparición, ya que fue el 21 de septiembre, cerca de las 17:00 horas, cuando la joven fue vista por última vez en la colonia Mártires de la Plaza, en la capital michoacana. Sin embargo, el 25 de septiembre la Fiscalía de Michoacán la localizó sin vida.
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