Cuatro meses han pasado desde que se dispersaron los primeros créditos “a la palabra” de 25,000 pesos, que el Gobierno que preside Andrés Manuel López Obrador, otorgó a miles de empresarios.
Con el objetivo de mitigar los efectos que causa la pandemia de COVID-19, el préstamo fue entregado a más de 24,000 millones de microempresarios, quienes utilizaron los recursos para pagar nómina de trabajadores, remodelar su negocio, comprar, entre otros motivos.
Sin embargo, el tiempo de gracia que se dio para iniciar con el reembolso ya concluyó, pues la regla marca que los beneficiarios deben de comenzar a pagar a partir del cuarto mes en que se otorgó el crédito.
Graciela Márquez Colín, secretaria de Economía, invitó a los beneficiarios de los créditos de 25,000 pesos, iniciar con la liquidación de su préstamo, pues afirmó que se trata de una acción solidaria para que el Gobierno vuelva a tener recursos para ampliar o extender el programa.
A la fecha, se han dispersado 24,700 millones de pesos los que se han dispersado, dijo la secretaría de Economía este lunes durante la conferencia de prensa vespertina para tratar temas de los programas de ayuda.
Según Márquez Colín se ofrecerán un millón de préstamos y ya están por llegar a la meta, pues anunció que en los los próximos días se estarán depositando los recursos de la gente que falta.
¿Cómo será el proceso de liquidación?
*Los beneficiarios tendrán que abonar 823.70 pesos cada 30 días a la cuenta donde recibió el dinero.
*Se trata de un pago por 33 meses ininterrumpidos para poder liquidar su crédito “a la palabra”.
*En total, los usuarios deberán pagar 27,182 pesos.
*Serán al menos 2,187 pesos de intereses.
Desde principios de mayo se inició con el depósito de microcréditos por la cantidad de 25,000 pesos en favor de empresas familiares registradas en el Censo del Bienestar.
Los préstamos en favor de las pymes beneficiaron a dueños de zapaterías, pastelerías, joyerías, papelerías, fondas, entre otros.
Para participar, las personas acreedoras a este beneficio debían estar registradas previamente en el censo del Bienestar, el cual se llevó a cabo durante 2018.
Aquellos que están inscritos en el censo y que alguna vez manifestaron interés por un apoyo financiero recibieron una llamada de parte de servidores de la nación, quienes solicitaron algunos documentos para poder entregar los recursos.
Una vez autorizado el crédito se depositó en una tarjeta bancaria, que pudo recoger el beneficiario en uno de los bancos participantes, más cercano a su hogar o negocio.
Los seleccionados eran referenciados a una sucursal bancaria cercana a su negocio o vivienda.
Los bancos participantes son: Azteca, Banorte y Santander.
Hay que recordar que, la garantía para entregar el dinero se realizó bajo “palabra de honor”, y por iniciativa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Los créditos fueron distribuidos en las zonas más afectadas por la contingencia del COVID-19, enfermedad que a la fecha ha dejado más de medio millón de infectados en el país.
Según datos de la secretaria de Economía, 500,000 créditos se entregarían en zonas metropolitanas, 300,000 en el sur sureste de México y 200,000 en el resto del país.
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