Autoridades estatales y municipales perfilan reactivar la industria cervecera en Nuevo León a partir de la próxima semana, ante las largas filas que se generan actualmente y el riesgo inminente de contagios de COVID-19.
A esta conclusión se llegó en una reunión celebrada en línea entre el secretario de Economía estatal, Roberto Russildi, con alcaldes de la zona metropolitana y secretarios de Desarrollo Económico de los municipios.
La intención es arrancar el lunes 1 de junio con la producción y ese mismo día también hacerlo con la distribución. Sin embargo, falta por definir el horario en que se surtirá el producto a las tiendas a fin de que esto no provoque aglomeraciones y con ello se desate un brote de contagios de SARS-CoV-2.
Otro de los aspectos que se busca combatir con la reactivación de la industria cervecera son los sobreprecios que se están dando en la venta del producto, tanto en establecimientos como en línea.
No obstante, estas acciones se van a tratar con la Secretaría de Salud y no se hará el anuncio oficial hasta que la dependencia lo determine.
Por otra parte, la industria cervecera mexicana “está lista” para reactivar su producción a partir del 1 de junio tras casi un mes y medio de parálisis por la emergencia sanitaria de COVID-19, afirmó la semana pasada Marco Mascarua, presidente de Cerveceros de México: Cámara de la Cerveza.
Estamos listos para reanudar operaciones cuando empiece el mes de junio, en ese sentido, con todas las medidas de seguridad que hemos aprendido de la experiencia de otros países y evidentemente seguiremos todas las medidas puntuales que la Secretaría de Salud dé
La parálisis de la producción cervecera inició a principios de abril, cuando Heineken y Grupo Modelo detuvieron sus plantas tras la emergencia sanitaria que decretó el 30 de marzo el gobierno federal, que suspendió industrias no esenciales como la de bebidas alcohólicas.
Mascarua cuestionó que esta industria no se considere un sector esencial, incluso en el plan hacia “la nueva normalidad” que el gobierno presentó la semana pasada y que iniciará el 1 de junio, aunque dijo “entender los dilemas y la complejidad” de las decisiones.
La industria cervecera en México, el haber sido cerrada, es una excepción a nivel mundial. Prácticamente cuatro o cinco países solamente fueron los únicos que cerraron la industria cervecera, entonces francamente sí nos tomó por algo de sorpresa
La importancia de la cerveza en México radica en que es el primer exportador y el cuarto productor de esta bebida a nivel mundial. Con 124,5 millones de hectolitros producidos en 2019, de los que se exportaron 40,1 millones por un valor de USD 4,858 millones, la cerveza representa el 25%, de las exportaciones agroindustriales en México.
El representante cervecero mostró preocupación por los efectos a largo plazo en la cadena de valor, que genera 650,000 empleos directos e indirectos, con 5,000 agricultores que siembran 323,000 hectáreas de cebada para la producción.
El representante industrial resaltó la importancia de mantener abiertas las cadenas de valor con los principales socios comerciales de México, sobre todo porque el consumidor de cerveza es muy sensible a los cambios.
Al no tener nuestras cervezas en mercados internacionales corres el riesgo de que se te metan otras cervezas internacionales y entonces, hacia futuro, pierdas esos consumidores que durante años han tomado tus marcas
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) prevé que con la reactivación de la industria cervecera del país los precios de esta bebida alcohólica comenzarán a bajar, luego de que el paro en la producción y distribución de este producto provocó un alza de precios.
“Afortunadamente ahorita estábamos en la cosecha de cebada, y todas las cerveceras la recibieron, eso hizo que no se perdiera el producto base y ya están listos para empezar a producir. Ahí vamos a ver un cambio en el precio en una semana más, que espero ya empiecen a funcionar las plantas cerveceras”, dijo a principios de mayo Ricardo Sheffield, titular de Profeco.
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