En el año 2007 la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) documentó por primera vez la actividad de Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho” quien junto con su cuñado, Abigael González Valencia, intentaban introducir cocaína colombiana desde México a Estados Unidos.
Ambos eran integrantes del cártel del Milenio, que en dos años ya no sólo tenía proveedores colombianos sino también en Ecuador, lo que prendió las alertas sobre las operaciones de esta organización criminal y su expansión.
En 2010, “El Mencho” y los hermanos González Valencia junto con otros sicarios se separaron de la organización para formar el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) cuyo primer objetivo era disputar las importantes plazas de Michoacán y Jalisco.
A partir de entonces, en menos de una década, la organización logró constituirse en un cártel trasnacional y uno de los más temidos en ambos lados de la frontera. “El Mencho”, es actualmente uno de los narcotraficantes más buscados del mundo por el que se ofrecen millonarias recompensas.
Un análisis de 2017 de la organización Insight Crime reveló que el CJNG se había convertido en uno de los cárteles de más rápido crecimiento, que de ser una célula desertora de otra organización criminal pasó conformar una red criminal con ramificaciones en toda América, Asia y Europa.
Una de las claves de su rápido ascenso es la ubicación estratégica de sus operadores en la frontera con Estados Unidos, de acuerdo con el análisis de la organización así como en la frontera entre EEUU y Canadá, además del control de rutas con salidas a los océanos Atlántico y Pacífico.
Una de sus principales armas es el uso de la violencia y sus alianzas con grupos criminales locales e incluso extranjeros, como es el caso de desertores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se han encargado de instruir a los integrantes de la organización sobre el uso de explosivos.
“El CJNG es reconocido por operar con un perfil más bajo que el cártel de Sinaloa, y no cabe duda de que ninguno de sus líderes se expuso a la fama de la manera como lo hicieron Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán o Ismael ‘El Mayo’ Zambada durante décadas. Aún así, se ha asociado al CJNG con múltiples actos de violencia espectacular”, detalla el reporte de Insight Crime.
De acuerdo con reportes del gobierno estadounidense, el CJNG distribuía hace tres años cocaína y metanfetaminas a lo largo de 10,000 kilómetros de litoral en el Pacífico, abarcando un área que iniciaba en América del Sur y terminaba en Canadá.
“El crecimiento del CJNG ha sido posible y se ha acelerado con la decadencia de otros grupos rivales, como el cártel de Sinaloa, Los Zetas, el cártel del Golfo, el cártel de Tijuana y los Caballeros Templarios. Todas estas organizaciones, cuya existencia antecede en muchos años a la del CJNG, han pasado por la captura o la muerte de sus mayores líderes en los últimos cinco años. La pérdida de control de sus áreas de operación claves ha abierto la puerta al CJNG”, destacó.
En su Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas de 2016, la DEA advirtió que el CJNG era una de las seis organizaciones mexicanas con mayor presencia en Estados Unidos, gracias a los centros de distribución establecidos en Los Angeles y Atlanta, y también en ciudades como Miami, San Antonio, San Francisco e incluso Roanoke, Virginia.
Ahora versiones de que “El Mencho” está enfermó y dos de sus hijos, “El Menchito” y Jessica Johanna Oseguera, presos en Estados Unidos, el futuro del CJNG aparentemente es incierto, pues Nemesio Oseguera presuntamente nunca preparó a un posible sucesor y tampoco compartió su know how sobre el manejo de la organización.
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