El Archivo General de la Nación (AGN) hará públicas dos versiones sobre el espionaje que el Estado mexicano le realizó a Raúl Salinas de Gortari, hermano incómodo del ex presidente Carlos Salinas de Gortari.
Esta documentación podrá ser consultada por la población el próximo mes de marzo, donde se darán a conocer detalles sobre su esfera más íntima, como su ideología política y la narración de diversos actos delictivos.
De acuerdo con la resolución del Comité de Transparencia del AGN, a la que tuvo acceso el periódico El Universal, se ordenó clasificar, de manera parcial, la información de naturaleza sensible de los expedientes sobre Raúl Salinas, durante el periodo de 1980 a 1985, mientras se desempeñaba como funcionario de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (Conasupo).
En el texto se indica que la AGN posee dos expedientes. El primero contiene datos que abarcan de 1983 a 1985, y fue localizado en el acervo de la extinta Dirección Federal de Seguridad (DFS); mientras que el segundo, contiene 25 hojas que comprende el periodo de 1980 a 1984, el cual está constituido con información de los documentos del acervo de la extinta Dirección General de Investigaciones Políticas y Sociales (DGIPS).
Ambos fueron encontrados en la caja 330 del Fondo Versiones Públicas en el Palacio Negro de Lecumberri, que actualmente es sede del AGN.
De acuerdo con la resolución, el pasado 17 de enero, el Comité de Transparencia estudió la propuesta de la Dirección del Archivo Histórico Central de AGN, de testar toda la información sensible sobre Raúl Salinas de Gortari en el expediente de la DFS, “que contiene diversos datos relacionados con su esfera más íntima, como lo es su ideología política, así como la narración de diversos actos delictivos”.
En el mismo documento se indica que “la titular de la dirección sugiere, esencialmente, que deben de testarse los nombres de las personas que aparecen en los informes, ya que en esa documentación se da cuenta de su ideología u opinión pública, así como la de diversos actos delictivos”, y también se indica que se buscó imprimir la información que cita diversos domicilios.
A pesar de esta recomendación, el Comité de Transparencia desestimó esta advertencia porque en la documentación se señalaba que “Raúl Salinas de Gortari es una persona de relevancia política, en virtud de que ocupó diversos cargos en la Conasupo. Máxime, si se parte de la base que su ideología política como elemento abstracto, debe de ser considerada como el acto de representación”.
Sin embargo, las autoridades ordenaron: “Por lo tanto, al ser legítimo que la sociedad conozca la información que recabaron las autoridades de inteligencia del Estado mexicano sobre Raúl Salinas de Gortari, puede concluirse que en el caso concreto debe prevalecer el derecho fundamental de acceso a la información pública, y en consecuencia, su máxima publicidad”.
El Comité de Transparencia consideró que deben de testarse los nombres de los funcionarios que generaron los informes de inteligencia, debido a que “la integridad de estos individuos correrían peligro si se revelaran estos datos, además de que no puede desentenderse de que sus seres queridos, también pueden ser objeto de todo tipo de agresiones injustificadas”, salvo las personas que se desempeñaron como titulares de las corporaciones de inteligencia por su relevancia pública.
El organismo confirmó parcialmente clasificar la información propuesta por la Dirección del Archivo Histórico Central referente a nombres de personas que son mencionadas en el expediente, por no ser de relevancia pública ni social, por lo que se testarán nombres de quienes aparecen en 10 hojas del expediente de la Dirección Federal de Seguridad.
El próximo mes de marzo se harán públicas las versiones que contiene a detalle la información sobre Raúl Salinas de Gortari.
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