Mientras Culiacán ardía, 55 reos se fugaron del penal de Aguaruto y aterrorizaron las calles

Mientras en varios punto de Culiacán, Sinaloa, se vivían momentos de pánico por las balaceras, en el penal de Aguaruto, que se ubica a unos metros del Aeropuerto Internacional de Culiacán, se registró la fuga de 55 reos, según informó Cristobal Castañeda, secretario de Seguridad del estado durante la conferencia de prensa del Gabinete de Seguridad esta mañana.

En un video que circuló en redes sociales se puede escuchar a varias personas alarmadas a las afueras del penal, pues aprecian cómo los reos, por un lado, están siendo recogidos en camionetas y, por el otro, bajan a punta de pistola a varios automovilistas que pasan por la zona con el fin de robar sus vehículos y escapar de ahí.

Durante los escasos 20 segundos que dura el audiovisual, se puede oír a una mujer sobresaltada que comenta: “¡Los están liberando!”. Segundos después, un hombre explica la situación: “Mira, mira, van a quitar el carro. Eh, con rifles están quitando carros, mire”. Al final, la voz de la misma mujer se vuleve a escuchar con una frase que reflejaba el temor que se vivía en esos momentos: “No, nos podemos salir”.

De acuerdo con información de Castañeda, la fuga se inició a partir de un amotinamiento de 55 personas, en el cual se despojó a cinco custodios de sus armas y luego los agredieron. Después de la huida se recapturó a cuatro sujetos y en las siguientes horas se localizó a un par más, por lo que hasta el momento hay 49 internos libres.

Ayer, durante una entrevista con Milenio, Castañeda explicó que en su recorrido al penal, se encontraron con algunos enfrentamientos: “Cuando estábamos en la zona de Tres Ríos e íbamos para el complejo a atender el tema, fuimos agredidos. Ha habido eventos de este tipo a lo largo de la ciudad y lo que queremos hacer es mantener el control y evitar que se aumente cualquier situación”.

Cuando profundizó en la explicación de su llegada al penal, el secretario de Seguridad relató que al encontrarse con varios prófugos tuvieron un intercambio de disparos, en donde “aparentemente perdieron la vida dos de los custodios que estaban resguardando el lugar”. Sobre este último punto, Castañeda rectificó en la conferencia de prensa de esta mañana y mencionó que no hubo ningún elemento de seguridad abatido.

Sobre la cantidad de reos que salieron del penal, Castañeda puntualizó que se trataba de entre 20 y 30 presos de los cuales ya se había “logrado la recaptura aparente de cuatro elementos y estamos haciendo un operativo adicional para tratar de dar con el paradero del resto de la gente que se salió”. Sin embargo, ahora se sabe que el número de gente que se escapó fue mucho mayor.

Durante la conversación con el mismo medio acerca de la situación al interior de la prisión, Castañeda descartó la posibilidad de que se hubiese presentado algún motín: “El penal está en calma, tenemos la presencia de autoridades de los tres niveles de gobierno y estamos intentado restablecer el control de los diferentes puntos de la ciudad”. No obstante, la nueva versión apunta a que sí hubo una rebelión.

El panorama de fugas en Aguaruto

En 2018, el gobierno del estado de Sinaloa informó la inversión de 75 millones de pesos para la construcción de dos módulos más en el penal y así evitar más fugas, pues hasta ese año y desde el 2016 habían ocrrido siete eventos de esta naturaleza. Cabe decir que una de las cámaras, informó Cristobal Castañeda, estaría destinada a internos peligrosos.

El penal de Aguaruto es relevante en este sentido, pues desde agosto de 2016 a ocubre de 2018 se habían fugado narcotraficantes como Juan José E, alias “El Azulito”; Alfonso L, alias “Limón”; Rafael Guadalupe F, alias “Changuito Ántrax” y Francisco Javier Z, alias “Pancho Animal”.

En aquel entonces, Castañeda confirmó que se habían encontrado objetos ilícitos durante las revisiones que se realizaban como teléfonos móviles y drogas de varias clases. Además responsabilizó a los custodios de las fugas de reos, al asegurar que ellos las apoyaban; les abrían las puertas y los dejaban escapar.

En julio de ese año, dos reos considerados como de alta peligrosidad se dieron a la fuga sin ningún tipo de problema, gracias a que consiguieron uniformes de custodios, lo cual les permitió salir por la puerta principal del penal.

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