En la Ciudad de México, un adolescente de 14 años de edad, que presuntamente vendía drogas en la secundaria y que "presumía" ser narco, fue secuestrado por el cártel de Tláhuac, golpeado, amarrado, y finalmente tirado afuera de su casa, sin embargo con vida.
El joven a quien decían "Junior", creó el rumor que poco a poco fue creciendo y esto llegó hasta los oídos de los verdaderos traficantes, quienes lo siguieron y corroboraron las historias que circulaban a su alrededor eran mentira, incluso las pequeñas dosis de la supuesta droga que venía, las conseguía de un conocido.
Así que como venganza, durante la tarde del miércoles, el comando armado le dio un "levantón" cuando "El Junior" salía de la escuela secundaria, el menor fue golpeado y luego envuelto en plástico transparente para empaquetar, le colocaron una bolsa amarilla en la cabeza y lo dejaron con vida en la puerta de su casa junto con un mensaje en su cuerpo firmada y de acuerdo a las autoridades, adjudican este hecho al Cártel de Tláhuac.
De acuerdo con los testigos, el hecho ocurrió alrededor de las 18:00 horas y fue observado por varias personas de la colonia Granjas en el Sur de la Ciudad de México, quienes reportaron la situación al 911.
10 minutos después, llegó una patrulla de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, pero no encontró al joven, pues los familiares de "El Junior" lo trasladaron por sus propios medios al Ministerio Público.
El menor relató lo sucedido, su padre rectificó esto a las autoridades y dejó en claro que no quería problemas, tras esto los padres no levantaron una denuncia y tampoco dio su declaración el adolescente, según informó el portal El Universal.
La procuraduría local ordenó vigilar el sector e indagar el entorno familiar del joven para evitar alguna situación más complicada, aunque en el sitio no se encontraron cámaras de vigilancia, por lo que se desconoce las características de los agresores.
"Juanito Pistolas": el sicario de 16 años que tenía su propio rap y murió decapitado en Nuevo Laredo
Uno de los 11 integrantes de la "Tropa del Infierno" perteneciente al Cártel del Noreste (CDN), que fueron abatidos hace unos días por la Policía de Tamaulipas en Nuevo Laredo, era "Juanito Pistolas", un joven sicario de apenas 16 años de edad.
Tan pronto se supo de su muerte, rápidamente corrió la noticia en redes sociales de que "Juanito Pistolas" había sido detenido por la Fuerza Tamaulipas anteriormente en el año del 2015. Pero fue puesto en libertad por tener en ese entonces tan solo 13 años.
El niño sicario resultó ayer decapitado debido a las ráfagas de disparos que intercambiaron los integrantes del Grupo de Operaciones Especiales del Centro de Análisis, Información y Estudios de Tamaulipas (CAIET) con la "Tropa del Infierno", a la que pertenecía el menor de edad, famoso en la zona por haber llegado tan joven al crimen organizado.
Era tal su fama, que en redes sociales circulan unos videos de narco rap dedicados a él. Uno de ellos es llamado "Comandante Chikitín", donde se hace alusión a que ingresó a las filas del CDN como sicario desde los 13 años.
"No importa la edad para andar aquí jalando, yo soy un chavalo pero aquí ando laborando. 'Juanito Pistolas', así me han apodado", dice el coro de la canción compuesta en su honor y que ronda en internet.
El director de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), Juan Martín Pérez García, explicó que los grupos criminales reclutan a niños, adolescentes y jóvenes para cometer delitos como el secuestro, pues los consideran desechables. Sin embargo, les hacen sentir importantes y con poder, elementos suficientes para que se unan con orgullo a sus filas.