El ataque al bar Caballo Blanco en Coatzacoalcos, Veracruz, ha sido el segundo más mortífero en los últimos 10 años. Sólo detrás del incendio de Casino Royale en Nuevo León en 2011. En esta ocasión, la agresión dejó un saldo de 29 personas que fallecieron por asfixia y quemaduras.
El 27 de agosto por la noche un grupo de aproximadamente cuatro personas llegó al lugar ubicado en la calle Romn Marín 1408 en la colonia Palma Sola. Sometió a los elementos de seguridad, disparó al interior del local y roció gasolina para después prender fuego.
Los criminales trabaron las puertas de emergencia y la de la entrada para que los clientes y trabajadores no pudieran salir. Horas después todo el país conoció la tragedia. Al inicio se habían reportado 23 muertos, pero un día después de haberse dado a conocer el atentado, seis personas más perdieron la vida en los hospitales en que eran atendidos.
Ya se conocen las identidades de algunas de las personas inocentes que fallecieron en el hogar y de quienes sus familias lloran, lamentan, y pelean por sus cuerpos en la SEMEFO que no se da abasto.
Uno de ellos fue Erick Hernández, "DJ Bengala", quien trabajaba en el lugar. Él era el encargado de poner música y amenizar el ambiente.
Tenía 29 años, estaba casado y era caracterizado por ser una persona amable y positiva. En su perfil de Facebook abundan las publicaciones de agradecimiento con la vida, y la manera en la que disfrutaba su trabajo.
El 17 de agosto pasado sus compañeros del Caballo Blanco le festejaron su cumpleaños "Que mi diosito mi virgen me los cuide y me los proteja siempre", publicó Erick.
Sus seres queridos lo comenzaron a buscar después de que se diera a conocer el ataque al bar. Publicaron su fotografía en redes sociales y le pidieron a los usuarios que rezaran por él. Horas después, se enteraron de que era uno de los fallecidos.
Otra de las personas que no pudieron escapar del incendio fue Nayeli Gómez. Tenía 24 años y era madre de dos niños de 4 y 7 años. Trabajaba en el bar como bailarina para poder mantener a sus hijos, apoyar a su madre América, y costear su carrera en Derecho.
Su familia la buscó con desesperación en los hospitales de la región en donde le informaron que estaban los heridos, pero fue hasta la tarde del 28 de agosto que la Fiscalía le informó que había fallecido por asfixia. "Era una persona que no se metía en problemas, amorosa, sociable, amiguera, no le gustaban los conflictos", dijo su tío a un medio nacional.
Su velorio se llevó a cabo en la casa en la que vivía y en donde sus seres queridos lloraron por su ausencia.
Valeria Valencia Martínez también era bailarina en el Caballo Blanco. Ella no nació en Coatzacoalcos. Era del municipio Jesús Carranza, pero decidió dejar su comunidad para buscar mejores oportunidades y darle una buena vida a su familia; así llegó al bar hace tres meses, en donde era conocida como "Lluvia".
Tenía 30 años, era madre de un niño de ocho, y estaba casa con Fortinio Gutiérrez. El 27 de agosto besó a su esposo y salió de su casa para trabajar en el bar, como todas las noches.
Por la madrugada del día siguiente su marido se enteró de lo que había sucedido. Le informó a los padres de ella y juntos fueron a buscarla. Las autoridades le dijeron que era una de las víctimas mortales. Hasta las tres de la tarde pudieron verla, identificarla y confirmar su deceso.
María José Pulido fue otra de las personas que murió en el lugar. Era una de las más jóvenes, tenía sólo 22 años. Era originaria de Tabasco pero, igual que Valeria, decidió buscar un trabajo que le permitiera mantener a su hijo, por lo que se mudó a Coatzacoalcos.
Todas las mujeres que murieron en el Caballo Blanco eran bailarinas o meseras. Mientras que algunos de los hombres que estaban en el lugar eran clientes.
Dos eran de origen filipino. Fueron identificados como Brayan Varrón de 25 años, y Nathaniel Alindan de 33 años. El lunes pasado habían llegado a Veracruz a bordo de un barco proveniente de Houston, Estados Unidos, y que atracó en la Terminal Marítima de Pajaritos.
Esa noche decidieron salir a divertirse sin saber que ya no podrían volver con vida al país en el que nacieron y dejaron a su familia.
Zarparían al día siguiente a Estados Unidos, pero el viaje se suspendió. El capitán del barco fue a Centro Integral de Justicia para reconocer los cuerpos.
En total han sido identificadas 23 personas. Las autoridades han intentado acelerar la entrega de cuerpos y peritaje, pero la cantidad de muertos es tan alta que aún se encuentran familiares afuera de la SEMEFO esperando a identificar a sus seres queridos.
Ellos son quienes murieron en Caballo Blanco:
1.-Pedro Ricardo García
2.-Carlos Alberto Arreola
3.-Óscar Pérez Soto
4.-Erick Hernández Enríquez
5.-Habid Ojeda Sierra
6.-Catalina Cecilio Díaz
7.-Anahi Granados de la Paz
8.-Antonio de Jesús Olaf Sadir
9.-López Rodríguez Romeo Antonio
10.-Samuel Morales López
11.-Mario Alejandro Martinez Lugo
12.-Miguel Ángel González
13.-Marco Antonio López García
14.-José Antonio Pola Zandate
15.-Pedro Cruz Vázquez
16.-Bryan G. Varron- Filipino
17.-Nathaniel Alindan- Filipino
18.-Israel Morales López
19.-María del Carmen Segovia Padua
20.-Xóchitl Nayeli Irineo Gómez
21.-Ulises Ramos Jiménez
22.-Osuky Rodríguez Pacheco
23.Francisco Alfonso Caririon Solis
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