En su primer día de clases, la pequeña Lían tomó una decisión muy importante: cambió la tradicional falda a cuadros por un largo pantalón para sentirse más cómoda durante sus actividades escolares.
Con ello, esta niña de 12 años ejerció su derecho de portar "el uniforme neutro", una nueva medida impulsada desde junio pasado por el Gobierno de Ciudad de México a favor de la equidad de género.
"Muchas veces no podía jugar o cuando estábamos en el descanso, como no hay bancas en algunas escuelas, era más difícil sentarse en el suelo", dijo a AFP Lían Estrella.
Nerviosa por vivir una nueva etapa, Lían llegó puntual a la escuela secundaria pública Leona Vicario, ubicada en un céntrico barrio capitalino, ataviada con un pantalón que contrastaba con las faldas cortas de sus compañeras que la miraban.
"El día que compramos el uniforme, le pregunté si quería llevar la falda o el pantalón. Desde que ella vio que tenía esa libertad de elección quiso ejercerlo y nosotros la apoyamos", contó Alejandra González, madre de Lían.
El anuncio de las autoridades capitalinas sobre el "uniforme neutro" en junio pasado desató polémica en redes sociales y organizaciones conservadoras, como el movimiento social contrario al matrimonio igualitario Frente Nacional por la Familia, reprobaron la medida.
Pero la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo que dicha iniciativa busca que las niñas puedan decidir si usan pantalón para evitar situaciones de acoso, así como para no sentirse incómodas al realizar deporte o en temporada de frío.
"Nos parece una medida sana que puede apoyar este proceso igualitario, sobre todo ahora en circunstancias como las que vivimos en términos de feminicidios y agresiones hacia las niñas", dijo Sandy Poiré, vocera de la organización Save The Children México.
La violencia contra las mujeres, en forma de feminicidios, maltratos, acoso y abuso sexual, se ha recrudecido en México en los últimos años.
Según Naciones Unidas, a diario son asesinadas un promedio de nueve mujeres en México.
Libertad o rebeldía
Otras alumnas de esta escuela secundaria tuvieran la misma idea que Lían de ir de pantalón, aunque portaron el que se usa reglamentariamente para la clase de deportes.
"El pantalón es más seguro, además hoy hace frío, y decidí que usaré el pantalón de deporte durante todo el curso escolar porque no hemos encontrado el modelo de pantalón para mujer", afirmó Aislín Argelia, de 14 años.
Padres de familia y tres estudiantes de la escuela secundaria dijeron a la AFP que el director de esta escuela secundaria se opuso al uniforme neutro desde que fue anunciada la iniciativa.
La AFP intentó hablar con el director del centro pero no fue posible.
"Sí, es un tema de discriminación. Se trata de no imponer algún tipo de vestimenta por el hecho de ser hombre o mujer", afirmó Alfonso García, coordinador de atención del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México.
El ministerio de Educación reafirmó que la medida del uniforme neutro es, sobre todo, una propuesta dirigida a las niñas, luego de las críticas que recibió la propuesta de la alcaldía capitalina por sugerir que los niños puedan usar falda también.
En los almacenes donde se venden los uniformes escolares sabían sobre esta iniciativa del uniforme neutro, pero no maquilaron pantalones con diseño expreso para mujeres.
"Pienso que eso (del uniforme neutro) es solo para causar revuelo porque en la práctica es muy complicado, no hay pantalones para niña, no los han fabricado", dijo Mary Rodríguez, empleada de un almacén que desde hace un lustro vende uniformes en el centro de la capital.
"Quizá algunas niñas se quieren poner un poco más rebeldes, pero las faldas siguen siendo lo básico" en las escuelas, sentenció.
Otras de las medidas anunciadas por las autoridades capitalinas para transformar los patrones de diferenciación y exclusión en las escuelas fue prohibir el corte de cabello al estilo militar entre los niños de primaria y secundaria de la capital.
"No se está discutiendo sólo la cuestión del uniforme, se está discutiendo si debemos mantener los patrones de diferenciación, esta mecánica de que no todos somos iguales", dijo Poiré, de Save The Children.