Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), “la acción de los seres humanos ya ha alterado más del 70% de toda la superficie sin hielo. Además, modificar la tierra para el uso agrario, puede suponer para muchas especies animales y vegetales la pérdida de su hábitat y el enfrentamiento a la extinción”, dice el organismo.
Y plantea que los efectos del cambio climático sobre la biodiversidad ya son visibles, “especialmente con muchas especies animales que ya se han visto obligadas a cambiar sus patrones de migración” y también con “los gravemente vulnerables osos polares -los ‘animales del póster’ del calentamiento global- que están muriendo de hambre en el Polo Norte debido a la falta de hielo marino en un mundo que se calienta”.
Es que el planeta enfrenta una grave amenaza y, si no se controla el impacto destructivo de las actividades humanas y el resultante cambio climático, la Tierra podría dejar de ser un lugar apto para vivir tal como lo conocemos.
Los expertos en medioambiente han compartido datos preocupantes en los últimos tiempos. Estas cifras ilustran claramente el deterioro ecológico: un millón de especies corren el riesgo de desaparecer y el 75% del suelo del planeta está en mal estado. Esta información fue compartida en la COP15 (Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica) llevada a cabo en diciembre de 2022 en Montreal, Canadá.
Como se ve, resulta esencial promover el cuidado de la biodiversidad. En ese sentido, recientemente, en Argentina, la Fundación Vida Silvestre Argentina realizó una alianza con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Territorial Sostenible de Chaco. ¿El propósito? Impulsar la ciencia ciudadana y, por ende, la conservación de la biodiversidad en la provincia chaqueña. Este acuerdo se materializa a través de la plataforma ArgentiNat, que es el representante nacional de iNaturalist, una de las plataformas de ciencia ciudadana destacadas a nivel global.
Esta herramienta se ha convertido en un pilar para la observación y documentación de la biodiversidad. Desde aficionados de la naturaleza hasta expertos en la materia, todos pueden capturar imágenes de distintas especies y subirlas a la plataforma. Y aquí viene lo interesante: gracias a la inteligencia artificial y la colaboración comunitaria, ArgentiNat ofrece la posibilidad de identificar cualquier organismo y ubicarlo en un mapa interactivo. Esta recopilación de datos abiertos se traduce en un tesoro para la investigación, el seguimiento y la conservación de la biodiversidad.
El impacto de ArgentiNat en el país ha sido notable ya que, hasta el momento, se han registrado más de un millón de datos relacionados con la naturaleza. Y ahora, los habitantes de Chaco tendrán la oportunidad de sumergirse en esta experiencia, descubriendo y aprendiendo sobre la rica biodiversidad que define a su provincia. Esta herramienta no solo promueve la educación y el conocimiento, sino que también alienta la compaginación de datos precisos que serán cruciales para la conservación de la vida silvestre en Chaco.
Ahora bien, no se trata solo de un acuerdo en papel y ya se han puesto manos a la obra. En días recientes, se llevó a cabo una capacitación dirigida a guardaparques provinciales y gestores ambientales. Estos profesionales serán la columna vertebral del proyecto, garantizando su correcta implementación y su éxito. Tomás Camarasa, subsecretario de Ambiente y Biodiversidad, fue uno de los protagonista de la capacitación.
La provincia de Chaco es un verdadero tesoro natural, con un potencial enorme para el ecoturismo y una serie de áreas protegidas e instituciones comprometidas con la biodiversidad. Hasta la fecha, se han registrado aproximadamente 15,000 observaciones de alrededor de 2,500 especies en ArgentiNat. Así las cosas, técnicos, educadores y ciudadanos, sin importar su edad, se unirán en este esfuerzo colectivo para profundizar el entendimiento de la biodiversidad chaqueña y garantizar su protección.
Un nuevo Parque Nacional en Chaco
Otra buena noticia para la biodiversidad de Chaco llegó a principios de 2023, cuando el Congreso de la Nación convirtió en ley la creación del Parque Nacional Laguna El Palmar, un área de rica biodiversidad que comprende una superficie aproximada de 5 mil hectáreas, de las cuales 3 mil pertenecen a humedales. Además, en las áreas de bosques fluviales y albardones se destacan especies como el aguará guazú, pumas y zorros. La especie emblema de la región es el surubí de lunares, un pez con una marcada influencia cultural en la zona litoraleña del país.
Este Parque Nacional, que se encuentra a unos 70 kilómetros de Resistencia, conserva un sector de transición entre las ecorregiones Delta e Islas del Paraná y Chaco Húmedo y es la primera área protegida del sistema nacional en conservar una muestra representativa de la Subregión Microsistemas y Planicies de Inundación del Complejo Bajo Paraguay.
Además forma parte del sitio Ramsar Humedales Chaco, de más de 500 mil hectáreas. Es decir que está incluida en la Convención sobre Humedales, conocida como la Convención de Ramsar, que es un tratado ambiental intergubernamental establecido en 1971 por la UNESCO.