Un fallo en el sistema de alivio, durante el proceso de reversión de crudo liviano y empaquetamiento de línea desde un buque a través del Terminal Esmeraldas, provocó un derrame de crudo que afectó a la playa Las Palmas, en Esmeraldas, al norte de Ecuador. Aunque el incidente no causó que las actividades de exportación y abastecimiento de combustibles se vieran afectadas, existe preocupación por las repercusiones medioambientales.
En un comunicado oficial, el Ministerio de Ambiente de Ecuador indicó que la prioridad de esa cartera de Estado es “precautelar el bienestar de la población y mitigar el impacto ambiental, garantizando el cumplimiento de todas las acciones de limpieza y remediación necesarias”. La estatal petrolera Petroecuador indicó que, desde que sucedió el fallo, la empresa movilizó a sus equipos de contingencia para controlar los efectos del derrame en el lugar.
Como parte de las acciones realizadas por Petroecuador están la activación de los convenios interinstitucionales y el plan de contingencia zonal que moviliza personal de la empresa y del Cuerpo de Ingenieros del Ejército para la contención y limpieza de las zonas afectadas. Además, la petrolera movilizó maquinaria pesada y camiones de vacío para succionar el producto e inició la construcción de cubetos de contención. A esto se suma el informe del suceso que presentaron ante el Ministerio de Ambiente, para que intervenga en la zona.
Las imágenes compartidas por las Fuerzas Armadas y los medios de comunicación locales muestran una extensa mancha de crudo en las aguas que bañan la playa de Las Palmas, uno de los balnearios más importantes de la zona con una extensión de cinco kilómetros.
“Nos aseguraremos de que la operadora responsable ejecute las actividades de contingencia, limpieza y recuperación de crudo en el área afectada, además de presentar el plan emergente respectivo”, indicó el Ministerio de Ambiente.
Por su parte, Petroecuador ha informado que, según sus estimaciones, 1.200 barriles de crudo se regaron en el mar. Las autoridades aseguraron que se logró controlar en un 90% la afectación en tierra y en un 60% el avance de la mancha en el mar al recuperar material contaminado.
La playa Las Palmas no solo es uno de los atractivos turísticos más relevantes de Esmeraldas, también es la primera a escala nacional con mayor registro de anidación de tortugas golfina, según los datos del Ministerio de Ambiente. Esta playa está ubicada en el centro de la urbe, en una zona cercana al Refugio de Vida Silvestre Manglares Estuario Río Esmeraldas.
De acuerdo con los registros oficiales, durante el período 2020 – 2021 se contabilizó el nacimiento de 9.266 tortugas de la especie golfina (Lepidochelys olivacea) que se incorporaron en la playa Las Palmas. Esta especie de tortugas se encuentra en estado de conservación vulnerable, según la categorías de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Según un informe de la organización medioambiental Oceana, si una tortuga marina es expuesta a un derrame de crudo, los efectos son alarmantes: “la exposición al petróleo durante solo cuatro días puede hacer que la piel de las tortugas marinas se desprenda continuamente en escamas. Esta condición persiste incluso después de que desaparezca la exposición y reciban tratamiento”, indica.
La Sociedad Española de Cetáceos también ha explicado que “la gravedad de las alteraciones que el petróleo ocasiona en estas especies marinas será función, fundamentalmente, del mayor o menor grado de contacto del crudo con los animales. En general, los individuos que se encuentren involucrados en un episodio de marea negra se ven afectados por vía inhalatoria, por ingestión y por contacto directo con la piel y mucosas”.
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