Su nombre es Sumak Helena Sirén Gualinga, pero la conocen como Helena Gualinga. Con tan solo 19 años, es una de las activistas indígenas que buscan la conservación de la Amazonía. Gualinga pertenece a la comunidad quechua Sarayaku. Helena Gualinga participó, por segunda ocasión, en la Conferencia de las Partes (COP 26), un foro internacional de las Naciones Unidas que busca comprometer a las naciones del mundo en la lucha contra el cambio climático, que se realizó en Glasgow hasta el 12 de noviembre del 2021.
Las mujeres de apellido Gualinga son conocidas por su lucha a favor de los derechos de los pueblos indígenas y de la naturaleza. Helena es hermana de Nina, sobrina de Patricia y nieta de Cristina, todas activistas, todas de apellido Gualinga.
En una reciente entrevista que Helena Gualinga ofreció a El Comercio de Ecuador, la joven activista mostró su decepción con la última COP 26, pues cree que hay una deuda con la amazonía. Además, resaltó que, aunque el gobierno ecuatoriano se haya mostrado a favor de la lucha contra el cambio climático, las políticas de la administración del presidente Guillermo Lasso son extractivistas.
Gualinga se refirió al anuncio del gobierno ecuatoriano sobre la creación de una nueva reserva marina para Galápagos, una noticia que fue aplaudida a nivel internacional por su carácter conservacionista, sin embargo, la activista ha indicado que “cuando hay una conferencia global, y se están discutiendo y negociando las políticas de mitigación contra el cambio climático y para proteger los puntos claves, como la Amazonía, no hace justicia anunciar la reserva de Galápagos”. Para ella, aunque la nueva reserva es importante, solo “fue una salida fácil para intentar quedar bien con todos, pero la agenda del Gobierno es extractivista”, según contó al diario ecuatoriano.
Cuando se dio el anunció de la nueva reserva marina, la hermana de Helena, Nina mostró su preocupación por la falta de propuestas concretas para la preservación de la Amazonía. En ese momento, Nina Gualinga escribió en su cuenta de Twitter que es “súper importante” que Galápagos esté más protegida, sin embargo, denunció que Lasso no mencionó que su administración “va a destruir la selva y territorios indígenas duplicando la explotación petrolera”. Además, indicó que “estamos en la COP26 para hablar sobre cambio climático y dejar los combustibles fósiles. En Ecuador, Lasso va a duplicar la explotación petrolera y causar destrucción y más crisis climática”.
Helena Gualinga se ha ratificado en lo dicho por su hermana y ha mencionado que “el Gobierno que tenemos ahora no es ambientalista. Vemos cómo se habla de la justicia climática y de la transición, pero eso no es una prioridad en la política de este Gobierno”. Ha señalado que la actual administración lleva un discurso ambientalista a espacios internacionales, pero la realidad en el país es distinta: “lo que vemos en Ecuador es que la explotación petrolera se va a duplicar y la frontera petrolera se está expandiendo”.
A mediados de octubre, los representantes de los pueblos y nacionalidades indígenas de Ecuador demandaron ante la Corte Constitucional a Guillermo Lasso para evitar la explotación petrolera y minera. El descontento de los grupos indígenas recae sobre los decretos 95 y 151, expedidos por el presidente ecuatoriano, que buscan expandir las extracciones petroleras y mineras en la amazonía ecuatoriana.
La demanda indica que se ha vulnerado el derecho de los pueblos y nacionalidades indígenas de ser consultados sobre la ampliación de las actividades extractivas en sus territorios. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el Consentimiento Libre, Previo e Informado (CLPI) es un derecho específico de los pueblos indígenas reconocido en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (UNDRIP por sus siglas en inglés). A través del CPLI, los pueblos indígenas pueden dar o negar su consentimiento a un proyecto que les afecte a ellos o sus territorios. Una vez que hayan dado su consentimiento, pueden retirarlo en cualquier etapa del proceso. Por otra parte , el CLPI les permite negociar las condiciones bajo las cuales se diseñan, implementan, supervisan y evalúan los proyectos. Este principio está consagrado dentro del derecho universal a la libre determinación.
Sobre la presencia de los pueblos indígenas en la Conferencia de las Partes, Gualinga dijo a El Comercio que “ese es un tema pendiente”, pues que hayan delegaciones indígenas ha sido un esfuerzo propio y no han tenido otro tipo de apoyo: “Nosotros nos hemos asegurado de que haya más visibilidad y más vocería de los pueblos indígenas. No es esfuerzo de la COP ni de los gobiernos, sino que es algo en lo que ha trabajado la comunidad indígena. Los resultados que vemos ahora son producto de más de 30 años de esfuerzos”.
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