La granjas de China han comenzado a criar cerdos gigantes del tamaño de “osos polares” ante la epidemia de peste porcina africana, que ha provocado una fuerte escasez de carne en el gigante asiático.
Según reportó Bloomberg, los criaderos están llevando a los animales a alcanzar un peso de unos 500 kilos, y el plan es seguir engordándolos. Algunos de estos cerdos podrán venderse por unos 10.000 yuanes (1.273 euros), lo que supone más del triple del ingreso mensual promedio de un granjero de Nanning, la capital de la región de Guangxi Zhuang, donde ya se ha registrado esta práctica.
Las autoridades locales en China se han visto forzadas a impulsar la producción de carne porcina ante la creciente escasez de este alimento. Por ello, la idea de criar cerdos de mayor tamaño se está extendiendo por diversas zonas del país, que se encuentra aún sumido en una disputa comercial con Estados Unidos.
Este tipo de especímenes criado por granjeros como Pang Cong son más pesados que un oso polar macho adulto promedio. En la provincia nororiental de Jilin, por otra parte, los altos precios de la carne porcina están llevando a los agricultores a criar cerdos de pesos comprendidos entre los 175 y 200 kilos, por encima de la cifra habitual, de unos 125 kilos.
Esta tendencia no es exclusiva de las pequeñas granjas. Grandes productores cárnicos como Wens Foodstuffs ya han puesto en marcha el aumento del peso de los cerdos.
La peste porcina africana es fatal y altamente contagiosa para los cerdos, pero no afecta a los humanos. Desde que se registró el primer brote en China a principios de agosto de 2018, el virus se ha propagado por todo el país e incluso Vietnam.
En toda China, miles de cerdos han sido sacrificados como medida de precaución. La población total de cerdos ha caído cerca de un 40% en un año mientras que la escasez ha disparado los precios al menos un 50%.
Oficialmente más de un millón de animales murieron en China por la enfermedad. Pero un granjero local, que ha perdido 15.000 cerdos, considera que esta cifra es inferior a la realidad. Las medidas preventivas incluyen desinfectar las granjas y restringir la venta de carne de cerdo y carne procesada, entre otras. Los animales infectados son sacrificados.
(Con información de Europa Press y AFP)