Para nadie es un secreto que la dirección de proyectos ha venido influenciando y transformando el panorama profesional en Latinoamérica y en otros países industrializados y emergentes de distintas latitudes, logrando influir e impactar las economías del mundo entero.
A la par con esto, bajo el firme avance de una sociedad más digitalizada, de inmediatez, clics y exceso de información; el campo de la dirección de proyectos experimenta cambios, así como las herramientas, tecnologías, estructuras y forma de hacer las cosas para lograr resultados óptimos y efectivos. Las organizaciones y, por ende, sus procesos están en continua evolución. Nadie escapa a esta ola de disrupción en entornos corporativos.
Pero junto a este cruce de fuegos es evidente que la dirección de proyectos está marcada por distintas tendencias que abarcan prácticas, metodologías, herramientas y nuevas formas de trabajar. Aunque no todo termina allí.
A pesar de los retos y la incertidumbre económica que enfrentamos desde hace décadas y que se acentuó con la pandemia, Project Management Institute (PMI) reconoce el compromiso de algunos países y empresas en Latinoamérica quienes continúan invirtiendo fuertemente en proyectos para impulsar el crecimiento futuro. Esta es una oportunidad para que los profesionales en dirección de proyectos den un paso adelante, marquen una diferencia y lleven sus carreras al siguiente nivel.
El trabajo remoto e híbrido llegó para quedarse. Pero más allá de esto, la gran pregunta es: ¿cómo se ha visto impactada la productividad?, ¿qué tanto se han logrado optimizar tiempos y recursos? Pues, de acuerdo con estudios recientes de PMI la buena noticia es que el desempeño y rendimiento de los proyectos no se ve significativamente afectado por la ubicación del profesional. Sin embargo, existen brechas de percepción entre los líderes y directores de proyectos con respecto a la efectividad del trabajo remoto, que deben sanearse. No se ha dicho la última palabra.
Priorizar el bienestar para impulsar la buena dirección
Para atraer y retener talento en dirección de proyectos de primer nivel, las organizaciones en Latinoamérica deben priorizar el bienestar de los empleados e invertir en programas de apoyo como la mentoría, la capacitación, las comunidades de práctica y los recursos de salud mental. De hecho, las empresas que proporcionan al menos tres de estos facilitadores están viendo un rendimiento notablemente superior en sus proyectos.
Entonces, mirando hacia adelante, las claves del éxito son bastante claras: elegir el enfoque adecuado de dirección de proyectos para cada proyecto, apoyar a los equipos en entornos de trabajo remoto e híbrido, cerrar las brechas de percepción de liderazgo y capacitar a los empleados con los recursos y habilidades que necesitan para prosperar. Las empresas que abracen estas prácticas no solo mejorarán sus resultados financieros a corto plazo, sino que también construirán una base sólida para la transformación digital, la resiliencia organizacional y el liderazgo de mercado a largo plazo.
Tecnología y banca digital, ejemplos a seguir
En esa misma línea es bastante claro que la necesidad de talento en proyectos tecnológicos es cada vez más urgente para toda la región. Tan solo la industria del software estaba en camino de crecer más del 9% en 2023, y se espera que siga aumentando entre un 6% y un 8% cada año hasta 2030, según la firma PricewaterhouseCoopers (PwC). Esa es una gran oportunidad para los directores de proyecto que desean ser parte de este crecimiento.
Pero el eje del asunto está en que la dirección de proyectos en medio de un mundo con trabajo híbrido ya no se trata solo de habilidades técnicas. Los estudios señalan que 2 de cada 3 empleos tecnológicos se centrarán más en habilidades impulsoras o “power skills”. Entonces, si los directores de proyecto quieren destacar en este campo, deben trabajar en habilidades de colaboración, comunicación e innovación.
Ahora, al hablar específicamente sobre la banca digital, es un sector que ha estado absolutamente en auge en Latinoamérica durante la última década, con proyectos de tecnología financiera y sistemas de pago que se expanden rápidamente. Sorprenden casos como el de Nubank: se lanzó en 2013, y ahora es el mayor servicio de tecnología financiera de Latinoamérica.
Pero, ¿qué significa esto para un director de proyecto? Para satisfacer la demanda en este sector, se necesita una combinación de conocimientos técnicos y esas habilidades impulsoras tan importantes. Vale la pena estar informado de las últimas tendencias empresariales y tecnologías, pero también necesitará ser un gran comunicador, colaborador e innovador.
El rol de la IA en la dirección de proyectos
La inteligencia artificial (IA) está transformando la dirección de proyectos, convirtiéndose en un diferenciador crucial en el mercado actual. Los profesionales y organizaciones que dominen la IA no solo estarán a la vanguardia, sino que redefinirán la ejecución y entrega de proyectos.
Este cambio paradigmático tiene implicaciones significativas: las organizaciones líderes en adopción de IA mejorarán su competitividad, y a su vez también atraerán el mejor talento. Paralelamente, para los profesionales, dominar la IA representa una oportunidad única para elevarse como agentes de cambio en sus organizaciones.
Por otro lado, la sinergia entre experiencia humana e IA creará un efecto multiplicador, impulsando niveles sin precedentes de innovación y valor en los proyectos. Así, quienes abracen esta revolución no solo estarán preparados para enfrentar los desafíos actuales, sino que darán forma activamente al futuro de la dirección de proyectos.
La clave de la innovación
Sin duda, uno de los desafíos que podrían enfrentar las empresas, según PMI, es la necesidad de actualizar constantemente las habilidades en un panorama en rápida evolución. Esto puede consumir tiempo excesivo, pero el resultado será estar al tanto de los últimos desarrollos y tecnologías.
¡No están solos! Hay un apoyo accesible de organizaciones profesionales como PMI que ayudarán a superar cada desafío, actualizar constantemente todas las habilidades en un panorama en rápida evolución. Para ello, PMI ofrece certificaciones reconocidas mundialmente, una comunidad global y una gran cantidad de recursos para apoyar el crecimiento profesional y empresarial.
Este es un buen momento para ser o convertirse en un profesional de proyectos, y si se puede desarrollar esa mezcla perfecta de habilidades, para estar bien posicionado, aprovechar las oportunidades que están surgiendo y al mismo tiempo destacar en diferentes áreas. Es vital mantenerse al tanto de los últimos desarrollos de la industria, pero no descuidar habilidades impulsoras que serán clave en un campo en rápida evolución.