Los esfuerzos de la industria automotriz en temas de tecnología y sostenibilidad están en auge. Solo en Colombia, la venta de vehículos ecológicos está en aumento. Así lo destacó el último reporte de Andemos. A corte de mayo del año 2022 se presentó un incremento en las ventas de más del 40% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Esta tendencia no solo permite entrever cómo las soluciones más sostenibles son adoptadas con mayor progresividad por los mercados, sino que a la vez abre una serie de preguntas sobre la diversidad de tecnologías, que en medio de la transición energética, se ponen a disposición de los usuarios.
En ese orden de ideas los conceptos ‘híbrido’ ‘híbrido enchufable’ y ‘eléctrico’ mandan la parada. Pero ¿cuáles son las principales diferencias?
Para arrancar, los carros híbridos se distinguen porque cuentan con motores eléctricos que vienen acompañados de un motor de combustible (diesel o gasolina). Dichos motores eléctricos son los encargados de permitir que el vehículo avance a velocidades bajas haciéndolo en silencio, de tal manera que en la medida en la que aumenta su velocidad, el vehículo puede avanzar en función de la cantidad de carga de la batería o la presión del acelerador, con uno u otro motor. Así, “El motor eléctrico proporciona energía adicional en situaciones que lo requieran, como acelerar, y recupera energía durante la frenada” cuentan los expertos de Renault.
Estas características hacen de este carro un vehículo ideal para la ciudad y los viajes, pues puede avanzar y ahorrar en la ciudad en modo eléctrico y en las carreteras también puede moverse sin sacrificar desempeño.
Los vehículos híbridos enchufables son similares a los híbridos convencionales, sin embargo su principal diferencia radica en que su batería cuenta con mayor capacidad y en que al ser enchufables se pueden recargar para funcionar como un vehículo 100% eléctrico por un periodo corto. Además, señalan los expertos de la marca, pueden alcanzar velocidades de 50 km por hora en modo eléctrico, lo que los hace convertirse en el vehículo ideal para personas que quieren ahorrar hasta un 75% de combustible mientras realizan recorridos urbanos.
En cuanto a los carros 100% eléctricos con tecnología E-Tech de Renault, funcionan únicamente con energía eléctrica almacenada en una batería. No tienen un motor de combustión interna y no emiten gases que contaminen, lo que contribuye a reducir la contaminación por polución y la contaminación auditiva, tan recurrente en los espacios urbanos.
A diferencia de los otros vehículos –también amigables con el medio ambiente– estos se destacan porque funcionan únicamente con energía eléctrica almacenada en una batería. “No tienen un motor de combustión interna y no emiten gases que contaminen” cuentan los expertos de la marca francesa.
Esta cualidad surge gracias a una batería de iones de litio que se puede recargar en todo momento sin dañarse, pues no tiene efecto memoria. Dicha tecnología, cuentan los expertos de la marca francesa, permite que hoy, las baterías tengan un periodo útil superior al 85% de la media de vehículos de esta categoría y que gracias al sistema de frenos regenerativos, la energía cinética generada durante la frenada se convierte en electricidad que se almacena y se emplea nuevamente. De ese modo, mientras en un carro eléctrico, un 95% de la energía se convierte en movimiento, en un automóvil de combustión solo un 30% del combustible es empleado para tal fin. Esto al final solo permite llegar a la conclusión de que los carros eléctricos son la promesa pública de una movilidad consciente, pensada para un futuro más limpio con menos emisiones.