Este fenómeno astronómico, que sólo se produce una o dos veces al año, empezó poco después de la salida del sol en el centro del continente africano, atravesando la República Democrática del Congo, Sudán del Sur y el norte de Etiopía. Luego avanzó hacia Asia y terminó en el océano Pacífico, en el sur de la isla de Guam, a las 09.32 GMT.
Sólo el 2% de la superficie de la Tierra está afectado por la fase total del eclipse, y es lo que lo convierte en un fenómeno excepcional.
Un hombre usa un telescopio para proyectar el fenómeno Personas miran el eclipse desde Israel Es menos espectacular que un eclipse total, donde el espacio que ocupa la Luna en el cielo corresponde exactamente al espacio que ocupa el Sol y provoca la noche, como fue el de Chile, Argentina y Uruguay en julio de 2019.
Niños usan lentes para ver el eclipse
Un hombre ve el eclipse desde su celular Niñas observan el fenómeno desde Teherán El eclipse casi total, desde Taiwán Las radiografías también son usadas para proteger la vista, en Jordania Vista parcial desde el Medio Oriente Vista parcial desde el Cairo Aficionados a la astronomía, junto a modelos del Sol, la Luna y la Tierra en Jerusalén Un cuervo se ve y de fondo el eclipse
Vista desde Medio Oriente Un hombre mira el eclipse con lentes especiales de protección El eclipse casi en su totalidad Una soldado mira desde un telescopio en Israel El eclipse detrás de las nubes Personas ven el eclipse con lentes Un niño mira desde un casco MÁS SOBRE ESTOS TEMAS: