Instituciones y municipios de toda Italia pusieron este martes sus banderas a media asta para recordar a las víctimas del coronavirus, homenajear a quienes le hacen frente a la pandemia y mostrar unidad ante la crisis sanitaria que afecta a todo el país, sobre todo al norte. Al mediodía, comunidades alrededor del país también llevaron a cabo un minuto de silencio con el mismo objetivo. Al martes por la noche (hora local) se habían registrado más de 105.000 casos positivos y casi 11.601 muertes, siendo esta última la cifra más alta del mundo.
La bandera tricolor italiana ondeaba este martes a media asta en las más altas instituciones del país, como el palacio romano del Quirinale, sede de la Jefatura del Estado; el Palacio Chigi, que acoge al Gobierno, así como en la fachada del Senado.
En la plaza del Capitolio, en el corazón de Roma, la alcaldesa Virginia Raggi, que vestía una faja tricolor sobre un abrigo negro, se refirió a “la herida que sufre todo el país”.
“Todos juntos saldremos de esto”, asegúro la funcionaria.
“Queremos recordar a las víctimas (...) y rendir homenaje al sacrificio y al compromiso de todos los trabajadores de la salud”, aseguró por su parte en un comunicado el presidente de la Asociación Nacional de Municipios italianos, Antonio Decaro, alcalde de Bari (Apulia, sur).
“A pesar de la grave crisis que estamos viviendo, no queremos que prevalezca el malestar, sino la unión, tanto en el duelo (...) como en la solidaridad, porque debemos estar unidos, todos juntos”, dijo Decaro.
La iniciativa partió de Gianfranco Gafforelli, presidente de la provincia de Bérgamo (norte), una de las más golpeadas por la pandemia de coronavirus.
“Como gesto de solidaridad con Italia”, el Vaticano también izó sus banderas a media asta “para expresar su cercanía a las víctimas de la pandemia en Italia y en el mundo, así como a sus familias y a aquellos que luchan con generosidad para ponerle fin”, indicó en un comunicado.
Como dato positivo, Italia informó que la cantidad de nuevos contagios ascendió a 2.107, cifra ligeramente superior a la del día anterior, pero en torno a la mitad que aquellos registrados en días anteriores. Además, la mayor parte de todos los contagiados, el 59 % se están recuperado en aislamiento en sus domicilios.
En la región más afectada, Lombardía, donde ha muerto más de 7.000 personas y todavía hay más de 25.000 positivos, hoy se redujeron por primera vez desde el inicio de la crisis los pacientes en cuidados intensivos y también fue menor el aumento de los contagios, según destacó en otra conferencia de prensa el asesor de Sanidad regional, Giulio Gallera.
Los datos llegan el mismo día en que el Instituto Superior de Sanidad aseguró que se ha llegado “al pico” en la curva de los contagios y que se mantendrá la tendencia aún en plano durante algunos días para después empezar a bajar.
Durante una rueda de prensa sobre la situación epidemiológica en Italia, el presidente del organismo, Silvio Brusaferro, dijo que sólo bajará “si se mantienen la atención” y “las medidas” y que “por ahora es difícil imaginar un reinicio de las actividades en poco tiempo”.
Italia prolongará el confinamiento de sus 60 millones de habitantes al menos hasta el 12 de abril para evitar nuevos contagios por coronavirus, anunció el lunes ministro de Salud, Roberto Speranza.
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