Italia comenzó el martes con la mala noticia del derrumbamiento de un puente en el noroeste del país, en la provincia de Génova, que se cobró la vida de al menos 35 personas en menos de cinco horas. El tema preocupa especialmente porque no es la primera vez que pasa.
Una de las posibles causas esbozadas por un experto radica en el material de construcción del puente: hormigón. Según la hipótesis del arquitecto genovés Diego Zoppi, miembro del Consejo Nacional de Arquitectos, los tirantes son débiles y propicios para provocar derrumbamientos de este estilo. El puente de Morandi lleva 50 años en uso, conectado Sampierdarena con Cornigliano gracias a la autopista A-10, que recorre la zona costera.
Se teme que el número de víctimas crezca en las próximas horas, puesto que el puente se derrumbó sobre una zona habitada y varios autos quedaron sepultados entre escombros. Un equipo de bomberos de 200 personas está dirigiendo la operación de rescate, con la complicación añadida de las condiciones adversas que azotan al norte de Italia con lluvias intensas. Angelo Borrelli, Jefe de Protección Civil, detalló que hay entre 30 y 35 autos que circulaban por el tramo derrumbado.
Por su parte, el primer ministro de Italia, Guiseppe Conte, y el viceprimer ministro, Luigi Di Maio, también viajarán a Génova para ofrecer su apoyo a las víctimas en persona.
MÁS SOBRE ESTE TEMA:
