Rusia conmemora este martes con un bajo perfil el centenario de la Revolución Bolchevique, un sismo político clave del siglo XX que dio origen el surgimiento de la Unión Soviética y un período de 70 años de comunismo en el inmenso país.
En épocas soviéticas, el aniversario de la Revolución de Octubre (según el calendario juliano en vigor en 1917), era celebrado con toda la pompa, con un inmenso desfile militar en la Plaza Roja cada 7 de noviembre.
Pero este año el programa del centenario es mucho más modesto, con exposiciones y coloquios con especialistas, realizado en coincidencia con un momento en que el Kremlin se ha propuesto evitar glorificar un cambio de régimen por la fuerza y ha consolidado sus críticas al comunismo.
"Este martes será para el presidente Vladimir Putin como cualquier otro día de trabajo", indicó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, recordando que el mandatario no participará de actos oficiales.
Muy pocos diarios rusos escogieron abrir sus ediciones del martes con el aniversario del centenario de la Revolución. "¿Gran celebración o gran tragedia?", escribió en tapa el tabloide Komsomolskaïa Pravda.
La Revolución de Octubre, o Revolución Bolchevique, tuvo lugar ocho meses después de la Revolución de Febrero (marzo, en el calendario actual), que había derrocado al zar Nicolás, cuando las fuerzas comunistas lideradas por Vladimir Lenin pusieron fin al gobierno provisional y dieron origen a la Rusia soviética.
Pocos años después, en 1922, los bolcheviques fundaron la Unión Soviética, período marcado por la creación de un régimen comunista, las extensas purgas en las que murieron millones de personas, el triunfo ante el nazismo en la Segunda Guerra Mundial y la consolidación como una superpotencia nuclear, pero con profundas tensiones internas. Terminó derrumbándose en 1991.
(Con información de AFP)
LEA MÁS: