Después de seis años de estar alejada de las presentaciones musicales en vivo, Rihanna tomó la decisión de volver a pisar el escenario; aunque dudó mucho en aceptar la invitación a ser la estrella del medio tiempo del Super Bowl, confesó que lo hizo por su hijo.
Rihanna se convirtió en una de las estrellas más importantes del pop desde la década de los 2000, pero se tomó un descanso porque no se sentía inspirada. Su regreso sorprendió porque será en uno de los eventos deportivos más importantes de Estados Unidos, el Super Tazón 2023.
En conferencia de prensa del Super Bowl, la cantante originaria de Barbados confesó que la propuesta de participar en el escenario del medio tiempo se la hicieron a los tres meses de que tuvo a su hijo, algo que, por una parte, la hizo dudar, pues se estaba adaptando a la vida como madre primeriza y no sabía qué podía pasar a futuro.
“Tenía tres meses de posparto y me preguntaba ‘¿debería estar tomando decisiones como estas ahora? Tal vez me arrepienta después”, compartió, según recuperó a EFE.
No obstante, su principal motivación para aceptar tan importante proyecto fue precisamente el hecho de que ahora es madre, pues se sintió capaz de hacer cualquier cosa en esta nueva etapa de su vida.
“Cuando te conviertes en madre, algo pasa que sientes que puedes hacer cualquier cosa; por mucho miedo que me diera, había algo estimulante en el reto que esto supone”
Cabe recordar que fue el 13 de mayo de 2022 que Rihanna dio a luz al hijo que procreó con su pareja, el rapero A$AP Rocky. Durante meses, la intérprete de Umbrella mantuvo un perfil bajo por su embarazo, ocasionalmente asistiendo a eventos de sus diferentes marcas de lencería y maquillaje.
Fue en diciembre que por primera vez compartió una foto de su bebé, del cual se desconoce su nombre; Rihanna aseguró que aún no lo daba a conocer porque ella y su pareja no habían escogido un nombre para su hijo.
A casi un año de convertirse en madre y después de haber rechazado en ocasiones anteriores ser la artista del Super Bowl, la cantante se presentará este domingo, 12 de febrero, en el State Farm Stadium, donde los Philadelphia Eagles se enfrentará a los Kansas City Chiefs.
Rihanna reveló en la conferencia que su show necesitará de un equipo de entre 300 y 400 trabajadores que estarán detrás de la producción, organización y con ella dentro del estadio.
En ocho minutos se necesitará montar todo el escenario en el que ella estará cantando por 13 minutos y, con la misma rapidez, tendrán que retirar cada parte de la estructura y abrirá el segundo tiempo del partido.
La intérprete de Diamonds compartió que este show le ha parecido algo “increíble, es casi imposible”, pues para que su presentación sea perfecta, sin errores, tuvieron que hacer varios ensayos.
Han sido tantos sus nervios por la responsabilidad que siente al ser la cabeza del medio tiempo que no había podido dormir en los últimos días y, además, su ensayó del miércoles tuvo que alargarse.
“He estado tan centrada en el Super Bowl que me olvidé totalmente de que se acerca mi cumpleaños (el 20 de febrero) Me olvidé totalmente del día de San Valentín. Estoy en plan Super Bowl, Super Bowl, Super Bowl”, dijo la cantante.
Fue en 2019 que Rihanna se negó a estar en el medio tiempo del Super Tazón en apoyo a la comunidad afroamericana, en solidaridad al jugador Colin Kaepernick de San Francisco.
El jugador fue vetado de su equipo en 2016 por hacer una protesta pacífica; mientras el himno se escuchaba, él se arrodilló. Este acto molestó a empresarios, quienes decidieron tomar acciones en su contra.
Información de EFE