Christina Applegate fue considerada una de las mujeres más deseadas de Hollyroowd a principios de los noventa. En 2003 ganó un Emmy por su participación como actriz invitada en “Friends” y fue nominada al Tony por el musical “Sweet Charity”.
Entre sus éxitos, se cuentan “La Cosa más Dulce”, “Pase Libre” y “Anchorman”. Pero fue sin duda su papel de Kelly Bundy en la comedia sobre una familia disfuncional, “Married with Children”, la que la catapultó a la fama. La serie duró 10 temporadas y se convirtió en la segunda de mayor duración de Fox después de Los Simpson.
A punto de cumplir los 51 años, la californiana reveló que lucha desde hace un tiempo contra la esclerosis múltiple. La ganadora de un Emmy, icono generacional en su adolescencia, atravesaba uno de sus momentos profesionales más importantes de su carrera con la serie “Dead to me” de Netflix.
Un camino difícil
Nacida en Los Ángeles, el 25 de noviembre de 1971, creció en una familia donde el dinero no abundaba. Hija de la actriz televisiva de escaso éxito Nancy Priddy y del productor discográfico Robert Applegate, su primer trabajo delante de una cámara tuvo lugar con tan sólo cinco meses de vida, en un anuncio de biberones. Sus padres se separaron poco después y ella se convirtió en el sustento económico de su madre, apareciendo en series, anuncios radiofónicos y obras de teatro en Los Ángeles. Como no podía permitirse una niñera, Nancy decidió convertir las tablas en guarderías improvisadas y con solo siete años ya había participado en tres producciones del director John Cassavetes.
“Para mi madre no fue fácil ser una actriz con problemas para trabajar y criar una niña. Éramos como dos vagabundas, sin saber nunca de dónde vendría el dinero”, revelaba la actriz. Algunas veces debieron recurrir a la ayuda del estado para poder sobrevivir.
Sin embargo, la inestabilidad la convirtió en una persona segura de lo que quería. En la secundaria no le fue fácil superar su timidez. A los 15 años se presentó en el casting de “Married with children” (Casados con hijos o Matrimonio con hijos, según el país), donde obtuvo el papel que anhelaba.
Para cumplir con los tiempos de grabación debió abandonar la escuela secundaria, decisión de la que se arrepintió, ya que a diferencia de su papel en la serie, Christina era una adolescente sumamente inteligente. Ed O Neill, que actuaba de su padre en la comedia, solía decir, entre orgulloso y admirado, que “solo alguien con su inteligencia puede lograr un personaje de ‘rubia tonta’ de manera tan convincente”. Contaba que solo eran necesarias una o dos tomas para lograr la escena, algo que agradecían los técnicos.
La comedia salió al aire y se mantuvo por diez años. La actriz explicó la razón del éxito televisivo. “Al comienzo, el programa conmocionó y disgustó a la gente. Pero en privado, disfrutaban reírse. Con demasiada frecuencia la gente mira a las familias perfectas en la televisión y piensa: ‘¿por qué mi familia no puede ser así?’. Pero en el caso de “Married with children”, la gente por fin podía exclamar: ‘¡Gracias a Dios que mi familia no es así!’”.
Reparto original de la exitosa serie ‘Matrimonio con hijos
La actriz se convirtió en aquellos años una de las mujeres “más deseadas” del mundo. También en un ícono de la moda por sus looks que toda adolescente quería copiar y tener en su guardarropa. Se volvió la más sexy de la década. Representaba los noventa a la perfección.
Después ganaría un Emmy por su papel como la narcisista hermana de Rachel Green (Jennifer Aniston) en “Friends” y grabó la serie “Samantha, ¿who?”, que duró dos temporadas y que marcó su destino en la comedia. Su último gran proyecto fue la serie de Netflix “Dead to me”, un trabajo que le dio mucha satisfacción pero que también fue baldazo de agua fría al enterarse en pleno rodaje que su vida ya no iba hacer la misma.
Su rol en la ficción, calificado por los críticos de la industria como el mejor de toda su carrera, suponía su renacer tras varios años apartada de la primera línea de Hollywood, haciéndose merecedora de nominaciones a Mejor Actriz en los Emmy y los Globos de Oro.
Infiel y plantón a Brad Pitt
Gwyneth Paltrow, Jennifer Aniston, Angelina Jolie... estos nombres de sobra conocidos por todos forman parte del curriculum amoroso de Brad Pitt. Pero Christina Applegate también conquistó el galán eterno de Hollywood. Tiempo atrás, la caleforniana contó un insólito episodio que muchos desconocíamos y que involucra al ganador del Oscar.
A los 26 años, el corazón de Pitt quedó destrozado al ver cómo ella le dejaba por otro.
La estrella icono de los 90 relató que se conocieron en lo adolescencia cuando él particopó de uno de los episodios de “Married with children”. Fue ahí donde surgió una amistad que hizo que Brad fuera un habitual invitado por la familia Applegate. Poco después, de amigos pasaron a novios. El actor, que era ocho años mayor que ella, empezó una relación de la que incluso existen fotografías, cuando el reinado de Pitt en Hollywood estaba todavía muy lejos.
No fue hasta una aparición de Applegate en el programa “Watch What Happens Live” conducido por Andy Cohen en el año 2015, cuando contó por qué se terminó todo entre ellos. Christina, de 18 años, plantó a Pitt la noche de los MTV Video Music Awards de 1989.
Y si bien la actriz en aquella ocasión no dio el nombre del hombre involucrado en este triángulo amoroso, al poco tiempo trascendería que lo dejó por Sebastian Bach, cantante de la banda de heavy metal Skid Row. Él no tuvo reparos en contarlo públicamente.
Bach es el “culpable” de que la historia de amor entre Pitt y Applegate llegara a su fin debido a la “breve aventura” que tuvo con la protagonista de “La cosa más dulce”. Hasta el día de hoy, el músico se jacta de que “hubo un momento en que estaba aún más bueno que Pitt”.
En 1996, se rumoreaba que Applegate estaba saliendo con Christian Slater, pero en 2015 la pareja descartó los rumores en ·The Late Late Show· y le dijeron al presentador James Corden que nunca sucedió. Luego conoció a su primer marido, el actor Johnathon Schaech, en 1997 -dijo que su “corazón dio un vuelco” en el momento en que se dieron la mano- y después de unos cuatro años juntos se casaron en 2001. Se separaron y solicitaron el divorcio en 2005. Fue una decisión “mutua”, según sus representantes.
Desde su divorcio, Schaech ha hablado sobre su amor y apoyo incondicional a Applegate. Durante un “Ask me Anything” de Reddit en 2016, el actor de ““¡Eso que tú haces!” dijo que su ex había creado “una familia maravillosa” con su nuevo esposo, Martyn LeNoble.
Antes de conocer a su actual marido, la intérprete salió con el patinador y fotógrafo Lee Grivas, quien falleció de una sobredosis de drogas en 2008. Tuvieron una relación durante unos tres años, aunque no estaban juntos en el momento de su muerte “Estoy profundamente entristecida”, dijo Applegate en un comunicado: “Lee fue un ser humano increíble que fue una parte extremadamente importante y hermosa de mi vida”
En 2008, Applegate comenzó a salir con el bajista holandés LeNoble, solo unos meses antes de que su representante confirmara que le habían diagnosticado cáncer de mama. Debido a la enfermedad, se sometió a una mastectomía doble dos semanas después del anuncio. “Lloro al menos una vez al día al respecto porque es difícil pasarlo por alto cuando estás parada frente al espejo. Cuando miras hacia abajo, es lo primero que ves… Es un recuerdo constante del cáncer que tuve”, contó en el programa de Oprah Winfrey.
Nueve años después se realizó una operación para remover sus ovarios y sus trompas de Falopio. “Es un alivio, es algo menos por lo que tengo que preocuparme. Ahora esperemos que no me pase por encima un autobús”, declaró, para ponerle un poco de humor al asunto.
Applegate le dijo a US Weekly que LeNoble fue crucial para ayudarla después de su diagnóstico. “Tengo un sistema de apoyo pequeño pero poderoso y Martyn realmente ha sido una parte increíble de mi vida”, dijo en 2010. “Sin él, no sé si podría haber pasado por esa situación. Él se dio cuenta en un momento en que hubo muchas pérdidas en mi vida en muchos niveles, por lo que ha sido una ayuda realmente increíble”. La pareja se comprometió en 2010 y se casó en 2013, dos años después del nacimiento de su hija Sadie.
“No lo puedo aceptar”
La vida de Christina Applegate ya no ha vuelto a ser la misma desde que la diagnosticaron esclerosis múltiple, (EM), una afección del sistema nervioso que afecta al cerebro y la médula espinal. La actriz, que en unos días cumple 51 años, ha tenido que aprender a vivir con su enfermedad y aceptar que hay cosas que ya nunca más va a poder hacer.
“Ojalá hubiese prestado más atención... ¿pero cómo iba a saberlo?”, dijo en una entrevista que ha concedido a The New York Times. La actriz reconoce que durante años notó hormigueo y entumecimiento en sus extremidades y que con el tiempo fueron empeorando. Finalmente, sus sospechas se confirmaron en el año 2021.
En ese momento, Christina estaba filmando la tercera y última temporada de la comedia “Dead to Me”, pero las grabaciones se pararon durante cinco meses para que pudiera empezar con su tratamiento. “Fue bueno para mí. Necesitaba procesar la pérdida de mi vida, la pérdida de esa parte de mí. Así que necesitaba tomarme ese tiempo”.
“¿Aceptarlo? No. Nunca voy a aceptarlo. Estoy enojada”, admitió la actriz, que ha tenido que aprender a vivir con su enfermedad. Hace solo unos días compartió una foto en Twitter en la que mostraba su colección de bastones. “Tengo una ceremonia muy importante próximamente. Va a ser mi primera salida desde que me diagnosticaron EM. Los bastones ahora son parte de mi nueva normalidad”, escribió en su mensaje en la red social. “Estén atentos para ver cuáles pasan la selección”, bromeó.
Applegate señaló que es “muy consciente” de sus cambios en su apariencia y movilidad. Y que ha tenido que “procesar la pérdida de su vida” y aún no está “totalmente bien”.
La entrevista se realizó un año después de que la actriz contará públicamente su enfermedad. “Ha sido un viaje extraño. Pero he sido tan apoyada por personas que conozco que también tienen esta condición. Pero como todos sabemos, el camino sigue. A menos que algún imbécil lo bloquee”, escribió el 21 de agosto en la red social. En el mismo mensaje, también pidió “privacidad” con su “camino duro” por delante.
Desde ese momento, la actriz intentó mantenerse alejada de las cámaras, aunque cada tanto daba alguna actualización sobre su salud en las redes. “Sí. Hoy cumplí 50 años. Y tengo EM. Ha sido difícil. Muchos están sufriendo hoy, y estoy pensando en ti. Que encontremos esa fuerza para levantar la cabeza. La mía actualmente está en mi almohada. Pero lo intento”, escribió a través de Twitter en noviembre de 2021.
La intérprete habló sobre el tema en plena promoción del estreno de la tercera y última temporada de “Dead to Me”, que llegará a Netflix el próximo 17 de noviembre. “Esta es la primera vez que alguien me va a ver como soy”, dijo al diario, contando que: “He engordado 18 kilos y no puedo caminar sin bastón”
Luego de contar que padecía esclerosis múltiple, la actriz se reencontró con Selma Blair, con la que trabajó en “La cosa más dulce” y que también fue diagnosticada de esclerosis múltiple en 2018. “Te voy a querer siempre”, dijo a su amiga tras anunciar públicamente su enfermedad.
Applegate habló de su vida con EM, que afecta al sistema nervioso central, y de lo importante que fue para ella terminar “Dead to Me”. Y aunque Applegate dijo que terminar la serie fue lo más difícil que ha hecho en su vida, el equipo y su coprotagonista, Linda Cardellini, especialmente, la respaldaron y apoyaron en todo momento.
“Ella fue mi campeona, mi guerrera, mi voz”, dijo Applegate sobre Cardellini. “Era como tener una mamá osa”. Y Cardellini dijo al diario que “solo quería lo mejor para la persona que quiero y me importa y con la que tengo el honor de trabajar”.
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