La gastronomía mexicana es muy amplia en colores, sabores y texturas, sin embargo existen platillos sumamente populares en las mesas de las familias de México que no son realmente originarios del país.
Churros
A pesar de que los churros se pueden encontrar fácilmente en las calles del centro de la ciudad o en algunas estaciones del Metro de la CDMX, la verdad es que su historia comienza en China.
Ahí los mercaderes portugueses conocieron el Youtiao, se trata de una tira de masa frita que se servía en el desayuno en pares, como un símbolo de la dinastía Song Qin Hui y su amada esposa.
Los portugueses llevaron ese alimento a la península ibérica donde le agregaron el azúcar y le dieron la característica forma de estrella, dándole origen a lo que hoy conocemos como churro en México.
Con el paso del tiempo la preparación se fue extendiendo hasta que durante la época de la Conquista, los españoles lo trajeron al territorio mexicano y al resto del continente americano.
Actualmente en nuestro país puede ser degustado de varias formas, pues el ingenio mexicano ha dado origen a los churros rellenos de cajeta, dulce de leche, chocolate y mermelada, suelen ser acompañados por chocolate caliente o alguna preparación a base de café.
Rosca de Reyes
La Rosca de Reyes es una preparación que no puede faltar el 6 de enero, su origen tuvo sus comienzos en la Edad Media en países europeos como Francia y España y al poco tiempo llegó a México durante la Conquista.
El pan con forma ovalada es símbolo del amor eterno de Dios, pues no tiene principio ni fin, según la tradición.
En México se tiene la tradición de quien encuentra la figura del Niño Jesús deberá cuidarlo hasta el dos de febrero, día que se celebra a la Candelaria.
De ahí que en la madrugada del 6 de enero, los niños reciban regalos que los reyes magos les dejan en sus casas en representación de los obsequios que le llevaron al Niño Jesús.
Ceviche
En temporada de cuaresma o en época de calor es muy común que se prepare un ceviche para refrescar el cuerpo, sin embargo el platillo es de origen peruano.
Una de las teorías más aceptadas por el mundo es que se le relaciona con la cultura Mochica, que habitó en la zona litoral de Perú durante los siglos II y VII, era preparado a base de zumo de tumbo, una fruta típica de la región.
En nuestro país su sabor es principalmente picante y tradicionalmente es preparado con chile, aguacate, camarones, surimi, jitomate y limón.
Las similitudes entre las preparaciones es la importancia que se le da al cítrico en su preparación y la unanimidad a la hora de situarlo como uno de los platos estrella de la gastronomía latinoamericana.
El ceviche fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación en 2004, por el Instituto Nacional de Cultura y cada 28 de junio se celebra su Día Nacional, fecha establecida desde el 2008 con el propósito de fomentar y difundir el ceviche peruano a nivel nacional como internacional.
Agua de Horchata
Los mexicanos siempre discuten, cuando se trata de sabores de aguas, a qué team pertenecen: horchata o jamaica, y a pesar de que es sumamente popular el sabor, no es originario del país.
Su verdadero lugar de origen viene del Mediterráneo, se le atribuye a la ciudad de Valencia, donde se prepara a base de tubérculos conocidos como chufas, las cuales tienen forma de nudos y provienen de una planta llamada juncia avellanada.
El agua de horchata llegó a México por medio de los españoles tras la Conquista. Los ingredientes para su elaboración son muy similares a los de Valencia pero en lugar de utilizar chufas se agregan granos de arroz remojados y no se le añade limón, pues normalmente la preparan con canela y vainilla para aromatizar la bebida.
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