Pedro Infante se consagró como uno de los actores favoritos del público mexicano y algunas de sus películas están catalogadas como parte esencial de la historia de la cinematografía del país, tal como los fueron Los Olvidados o Nosotros los pobres, pero ninguna de estas fue su favorita, sino que lo fueron aquellos proyectos que lo hicieron sentirse orgulloso de su desempeño.
Ismael Rodríguez, uno de los amigos cercanos de Pedro Infante, no sólo fue el cineasta en el que más confió a lo largo de su carrera, sino que también se convirtió en su confidente, con quien compartió sus inquietudes, inseguridades y gustos.
Según relató Ismael en una entrevista, el Ídolo de Guamúchil llegó a revelarle cuáles eran sus películas favoritas, pero sólo se trató de dos y en ambas él fue el protagonista.
El director aseguró que el sinaloense nunca sintió predilección por alguno de los proyectos en los que participó, sino que se sentía orgulloso de lo que había podido hacer con algunos de sus personajes.
La primera cinta de la que el Ídolo Inmortal se sintió feliz de haber hecho fue Los Tres Huastecos (1948), pues logró interpretar a tres personajes al mismo tiempo y con diferente voz.
El reto del actor fue que debía interpretar a los tres hermanos Andrade, los cuales eran idénticos físicamente, pero su carácter era completamente opuesto, lo que causa repetidos conflictos entre ellos.
Además, según Ismael, a Pedro le gustó que en este proyecto pudo trabajar con algunas de las actrices que él más quería y admiraba: Sara García, con quien tuvo una muy mala relación al principio, y Blanca Estela Pavón, quien fue una de sus más importantes mancuernas en el cine.
Fue a partir de esta película y de lo mucho que le gustó a Pedro, que Rodríguez buscó la forma de “darle gusto” a su amigo y comenzó a idear una cinta en la que el intérprete de Amorcito Corazón interpretara a siete personajes al mismo tiempo; no obstante, este proyecto no pudo llevarse a cabo.
Este filme obtuvo seis nominaciones en los premios Ariel: por Mejor Adaptación y Mejor Edición de Película, por Mejor Director y Mejor Guion para Ismael Rodríguez, por Mejor Actor Principal para Pedro Infante y Mejor Papel Juvenil para María Eugenia Llamas por su papel como Tucita.
La segunda película favorita de Infante fue Sobre las olas (1950) también dirigida por Ismael Rodríguez y coestelarizada por Beatriz Aguirre y Andrés Soler.
En varias entrevistas Pedro comentó que esta película era especial para él ya que encarnó a uno de los músicos mexicanos más importantes, Juventino Rosas, quien hasta hoy es reconocido a nivel internacional por su vals Sobre las olas.
Y es que el histrión, al haberse preparado como músico gracias al amor que sentía su padre hacia su profesión, lo llevó a ser un gran admirador de Juventino Rosas, por lo que para él fue un honor interpretarlo, según expresaba.
Esta película fue todo un éxito en cines, pues no sólo fue lanzada a color, sino que se estrenó en septiembre de 1950 en el Teatro Roble, mismo lugar donde se invitó al público a festejar las fiestas patrias el día 15 con la música del compositor y la interpretación de Pedro.
Sobre las olas fue aclamada por la crítica como una de los filmes históricos mejor realizados y con la mejor dirección musical.
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